En las oficinas de La Rosaleda se trabaja desde este lunes para configurar una plantilla que devuelva al equipo a Segunda División. Aunque ya en la primera comparecencia para hablar del nuevo proyecto tanto Kike Pérez, director general, como Loren Juarros, evitaran la palabra ascenso, ese tiene que ser el objetivo del Málaga CF en esta nueva categoría. Y para afrontarlo, la vía elegida es cantera y Rubén Castro. El canario, después del año pasado, vuelve a ser el elegido.
El Málaga ya le ha trasladado a 'RC24' la oferta para que continúe de blanquiazul la próxima temporada. Y si lo ha hecho, es porque cuadrarán las cuentas en Martiricos para encajar una ficha como la que se le ofrece al canario en la nueva realidad del club.
Ahora, la pelota está en el tejado de Castro, que tendrá que decidir si sigue un año más en Málaga, tal y como estaba en sus planes cuando firmó el verano pasado. Pero en esos planes, entraba jugar la temporada 2023-2024 en Primera División y no en Primera RFEF.
Pero para esa categoría, después del ridículo protagonizado por el Málaga con el descenso, es para lo que tiene que armar un proyecto Loren Juarros, y aspira que de nuevo Rubén Castro sea la bandera del mismo, como lo fue el verano pasado.
Quedarse con un jugador como Castro en la plantilla supone configurar un equipo que juegue para el canario, algo que esta temporada no se ha conseguido, a pesar de que la producción ofensiva del '24' haya sido casi la única que se ha visto este año en La Rosaleda entre goles, ocasiones o alguna asistencia.
A pesar de no ser como se esperaba, Rubén Castro ha sido, con diferencia, el mejor delantero del Málaga y con sus goles -diez- ha sostenido al equipo en más de un partido.
El canario ha jugado un total de 41 partidos con la camiseta blanquiazul, todos menos uno, y 32 de ellos saliendo en el once como titular. Precisamente Sergio Pellicer ha sido el técnico que más veces lo ha sentado en el banquillo, hasta en ocho ocasiones. Consideró el de Nules que Castro aportaría más cosas el equipo saliendo desde el banquillo. Aunque esa fórmula solo le sirvió en el choque en La Rosaleda contra el Zaragoza, un partido en el que el Málaga ganó 3-0 y el canario marcaron dos goles.
No fueron los 20 goles que repitió en Cartagena en las dos temporadas precedentes a su aterrizaje en Málaga, ni se le acercan, porque hoy la realidad del Málaga CF sería otra.
Con los diez tantos anotados en este curso, Rubén Castro se ha convertido en el máximo goleador de la historia de Segunda División, con 195 goles, y también el jugador nacional con más goles en la historia de LaLiga, con 288.
Si termina quedándose en Málaga, cuando arranque la pretemporada ya tendrá 42 años. Dicen de él que se cuida más que nadie, especialmente en cuanto a la alimentación. Si es así, necesitará de nuevo de esos números que no ha conseguido esta temporada para devolver al Málaga a Segunda. Un reto que los blanquiazules quieren afrontar con Rubén Castro como referencia. El primer intento no salió bien.