Malas noticias para la planificación deportiva del Málaga CF, buenas para la económica. El conjunto blanquiazul ha traspasado a una de las joyas de La Academia, Álex Calvo, al Andorra. El joven talento cordobés derribó la puerta al final de la temporada pasada y al club ha llegado una oferta irrechazable, por lo que ha tenido que dejar salir al extremo.
Álex Calvo irrumpió con fuerza la pasada temporada cuando el equipo estaba a la deriva para salvar un punto con golazo en Las Palmas que permitió la inercia negativa del equipo y soñar con la permanencia. Una quimera. Pero Calvo dijo aquí estoy yo.
Lejos de volverse loco, Pellicer lo fue dosificando hasta el final de temporada dándole minutos en casi todos los partidos pero nunca la responsabilidad de salir de inicio para no quemarlo. Fue una de las pocas noticias positivas del conjunto blanquiazul la temporada pasada. Jugó un total de 253 minutos pasando del juvenil al primer equipo directamente.
Tras el final de curso fue preseleccionado para la Sub-19 pero finalmente no acudió al campeonato de Europa.
Ahora, con contrato hasta 2024, el Málaga se ve en la tesitura de tener que vender a una de sus mayores promesas sin poder revalorizarlo un poco más, porque Calvo tenía todas las papeletas para formar parte de la primera plantilla esta temporada. Desde su irrupción, el Málaga tampoco ha podido afrontar una renovación del futbolista para aumentar su cláusula.
El precio de salida será de 1,5 millones de euros.