Sergio Pellicer, aunque convaleciente, ya está al pie del cañón con el Málaga CF y mañana dirigirá desde el banquillo el partido que tiene su equipo contra el UD Melilla a partir de las 12:00 horas, que servirá, al ser el segundo en cuatro días, para medir el nivel de la plantilla, de la que ha destacado que "ante cualquier golpe", como el recibido en Huelva, "reacciona". 

El técnico blanquiazul ha comparecido en la sala de prensa del estadio de La Rosaleda en la previa del choque adelantado de la octava jornada del Grupo 2 de la Primera RFEF por la celebración de la final de la Kings Cup -torneo de fútbol espectáculo organizado al alimón entre el streamer Ibai Llanos y Gerard Piqué- este próximo fin de semana en La Rosaleda. 

Precisamente sobre ese adelanto Pellicer ha dicho que le ha trastocado los planes, principalmente a la hora de repartir de la carga de esfuerzos, pero que también puede ser un buen "examen" para medir el nivel y la profundidad de la plantilla, ya que de nuevo se esperan cambios en el once malaguista tras los que se produjeron en el Colombino. 

Tras el empate en el estadio onubense, Pellicer tiene clara la receta para volver a la senda de la victoria y seguir en la parte alta de la tabla: "Jugar al límite todos los partidos". El técnico ha explicado que le dice a sus jugadores que jugar en el Málaga es distinto a jugar en cualquier otro equipo, ya que supone un mayor esfuerzo físico y, sobre todo, mental cada partido. "Es como jugar cinco partidos". 

Ha insistido el entrenador del Málaga CF ese límite lo exige que a su equipo siempre "le salen partidos de muchísimo esfuerzo", marcados por el ida y vuelta como en la segunda mitad de Huelva o cómo sorprendió el San Fernando en La Rosaleda. 

Además, cree que su equipo tiene que tener "más veneno arriba", algo que no tuvo contra el Recreativo de Huelva. "Tenemos más situaciones para llevar más goles. Hay situaciones en las que tenemos que ser más contundentes y hay jugadores que tienen que dar ese paso". 

Pero a pesar de ello, "lo más importante es que cualquier golpe que estamos encajando es que el equipo reacciona". 

El rival

Sobre el rival, entrenador por el malagueño Miguel Rivera, Pellicer considera que el fútbol está siendo "muy injusto" con el Melilla, puesto que tienen "un nivel competitivo muy alto pero están perdiendo partidos por pequeños detalles y en los últimos minutos". 

Sobre el papel, "todos esperamos" un rival con las líneas juntas y esperando su momento en las transiciones. "Pero eso mismo esperábamos contra el San Fernando y fue todo lo contrario. Había jugadores que muy pocas veces van a jugar con este ambiente y se soltaron, disfrutaron. 

El Melilla no conoce la victoria y llega a La Rosaleda necesitado de puntos. Aun así, "prefiero que no vengan con ansiedad, porque van a ser muy agresivos, porque es cierto que cuando un equipo gana tiende a relajarse. 

Parte de lesiones

La lista de bajas para el partido sigue siendo la misma, y Pellicer ha hecho un repaso por la nómina de lesionados del equipo. "Juan (Hernández), empezará la semana que viene a entrenar parcial con el resto del equipo". "Ramón la semana que viene entrenará con el grupo y alternará con el readaptador". El que más cerca está de volver es Haitam, que incluso puede entrar en la convocatoria para este jueves "por el tema emocional", ha especificado Pellicer, pero no para que juegue. El entrenador espera que para el partido contra el Real Madrid Castilla ya sí tenga el "alta competitiva". 

Con Víctor García, lesionado en el abductor, "habrá que esperar alguna semana más". 

La Kings Cup

Pellicer ha sido muy gráfico a la hora de explicar las diferencias entre lo que se vivirá este jueves en las gradas de La Rosaleda y lo que acontecerá el fin de semana. "A la Kings Cup, la gente vendrá a un espectáculo; mañana hay pasión, sentimiento, la gente en la grada con sangre en los ojos".