De milagro, después de noventa minutos siendo muy superior, se llevó el Málaga CF los tres puntos frente al Algeciras tras vencer 2-1 con goles de Gabilondo y Roberto que permiten despedir el inolvidable, para mal, 2023 con una alegría y tres puntos que mantienen a los blanquiazules muy vivos en la parte alta de la tabla.
La segunda mitad tuvo un toque de surrealismo, aderezado especialmente al final con una ocasión fallada por Milosevic que remató sin fe con toda la portería para él salvo Galilea el que hubiera sido el 2-2 y la guinda de la actuación del colegiado cordobés Camacho Garrote, que protagonizó una tarde nefasta en La Rosaleda.
Pero los tres puntos van con concordancia con la superioridad mostrada por el Málaga en el césped de su estadio, delante de 20.570 espectadores, más de un millar llegados desde el campo de Gibraltar para animar al Algeciras.
Sergio Pellicer, que recibió el cariño de la grada tras el minuto de silencio por el fallecimiento de su padre este sábado, tuvo más de un imprevisto para elaborar el once que empezó el partido. Juanpe fue baja de última hora por una contusión en la cadera. Y después del calentamiento, Víctor García se cayó del once al sentir molestias en el abductor izquierdo.
Salvados todos los obstáculos, Alfonso Herrero estuvo en la portería, Gabilondo y Dani Sánchez en los laterales, Murillo y Galilea en el centro de la defensa. Genaro y el debutante en liga Izan Merino formaron la medular. Larrubia en la derecha, Kevin en la izquierda y Dioni en la mediapunta formaron un frente de ataque culminado arriba por Roberto.
Camacho Garrote, un arbitraje nefasto
El Algeciras empezó el partido dominando los espacios, presionaba bien al Málaga en mitad de campo y no lo dejaba avanzar. Los blanquiazules buscaban las bandas. Genaro, con la pelota, se colocaba de tercer central y los laterales escalaban metros. Así, Izan era una isla en el centro del campo y Dioni bajaba a pedirla. Larrubia se metía entre líneas. No encontraba los sitios el Málaga.
En el 17', mientras el balón circuló de banda a banda, Izan Merino se coló en el área, y ahí, en posición franca de remate le llegó un centro desde la izquierda puesto por Dani Sánchez. Golpeó con el interior y se le fue arriba. En la siguiente jugada, Kevin no supo culminar una contra muy clara para el Málaga tras un robo en el centro del campo.
Entre tanto, el cordobés Camacho Garrote fue enfadando al público con varias decisiones que convencieron del todo. La primera, un posible penalti a Roberto. Y luego varias faltas que parecían claras que no señaló. Una un claro agarrón a Roberto cuando empezaba un contragolpe que prometía peligro.
Salvo esas dos ocasiones, el Algeciras presionaba de manera perfecta a mitad de campo al Málaga, intentando salir a la contra rápido. Un equipo con muy buenas hechuras el gaditano, que obligaba a los blanquiazules a ceder el balón atrás en muchas ocasiones.
Pero en el 24, con la fórmula de llevar la pelota a las bandas, esta volvió a llegar a la izquierda de las botas de Dioni, director de orquesta desde la media punta. Dani Sánchez se apoyó en Kevin y tiró un desmarque en carrera. Le dio la fuerza justa el del Llano de la Trinidad para superar a dos defensas y que Sánchez la recogiera casi en la línea de fondo. La puso atrás por el suelo y el rebote de un defensa hacia atrás fue letal, porque llegó Gabilondo como un avión para reventarla para dentro. Gol y piña con Sergio Pellicer.
Roberto estuvo a punto a la siguiente de hacer el segundo pero estrelló el remate un defensa del Algeciras.
En el 28', Galilea vio una amarilla muy protestada por una grada que ya la había tomado, con argumentos, con el colegiado. No tuvo el mismo criterio en la siguiente jugada con una falta por detrás a Kevin.
Pudo llegar el segundo en el treinta, con una falta lejana ensayada, la pelota le llegó a Galilea que intentó el remate de tacón. No le dio bien pero un defensa al intentar despejarla casi se la cuela en su portería. Era un Málaga muy superior en esos instantes.
Camacho Garrote siguió a lo suyo con una amarilla inexplicable a Dioni por un presunta falta cuando se iba solo hacia la portería. Antes no vio un claro empujón a Roberto en la misma jugada cuando el cordobés peleaba el balón en el aire.
Dioni también pudo ampliar la renta en el 40'. Dribló en un ladrillo dentro del área y Lucho le sacó el disparo. Tampoco pudo en el 44' cuando con un recorte dejó a toda la defensa del Algeciras detrás y se plantó de nuevo a Lucho. Pero le quedó para rematar con la zurda. Eligió la derecha y no dirigió bien la pelota. Estaba volcado el Málaga en el área del Algeciras, que empezaba a pedir a gritos el descanso.
Mientras gritaba, Izan Merino falló otra que clamaba al cielo. Un centro de Gabilondo cayó en medio del área por donde apareció el canterano. El remate de cabeza lo sacó Lucho y la pelota se lo quedó en los pies. Tardó en rematar lo que Lucho en rehacerse. Inexplicable. Entre los lamentos de la afición por los goles fallados se llegó al descanso.
Genaro y Dioni, expulsados
Con casi todos los jugadores dentro del túnel de vestuarios, el colegiado empezó a pitar y salió corriendo. Algo pasaba. Lo que pasó fue que Genaro y Turrillo fueron expulsados. Los dos capitanes a la ducha antes de tiempo. Empezaba la segunda mitad con Izan Merino sólo a los mandos de la nave en el centro del campo. Larrubia se puso a su lado para la creación y Dioni tapaba la derecha a la hora de defender.
Nada más echar a rodar la pelota se vieron los espacios que dejaban las dos expulsiones. en el 51', una indecisión a la hora de sacar la pelota al borde del área acabó con Larrubia y Dioni perdiéndola para que Murillo llegara con todo y cometiera una falta muy peligrosa al borde del área. Vio amarilla.
Roberto se aventuró en solitario en el 55' y en carrera sacó un disparo con la izquierda desde el borde del área que se estrelló en el palo derecho de Lucho.
Los espacios generaban muchas dudas. Como la falta de entendimiento entre Murillo y Galilea para despejar un balón que se quedó Sardinero para mandarla muy cerquita del palo.
Bajó algo el ritmo del partido hasta que Herrero se tuvo que emplear a fondo cuando un disparo lejano lo desvió Gabilondo. Galilea estuvo muy atento para mandar el rechace a córner.
Y el Málaga casi calcó el primer gol, pero por la otra banda. En el 74', calma para mover la pelota de un lado a otro, era Dioni el que le dio a la jugada para mandarla a la derecha. Fue Gabilondo el que la puso donde se tienen que poner esos balones. Allí apareció Roberto para mandarla para dentro.
No le sentó bien el gol Tomás Sánchez, que le arreó con todo a Larrubia consecuencias de la frustración. Para Camacho Garrote solo fue amarilla. Acto seguido Pellicer movió fichas y retiró a Murillo y Kevin para darle carrete a Cordero y Moussa.
El festival de Camacho Garrote culminó con la segunda amarilla a Dioni en una falta muy lejana que dejó al Málaga con nueve, frente a diez, los últimos cinco minutos. En el primero, recortó distancias el Algeciras. Los visitantes filtraron un balón al área para que el canterano Pimienta recortara distancias solo delante de Alfonso Herrero. La Rosaleda entraba en pánico. Loren, que llevaba un rato esperando para entrar, ingresó por Roberto. El cartelón, con cinco de añadido, ayudaba a la incertidumbre.
Loren se marchaba en una contra peligrosa y fue derribado. Se tiró al suelo para arañar segundos al crono. La tuvo clarísima el Algeciras. Herrero se elevó sobre todos para atajar un centro y en la caída se le escapó el balón. Para Camacho Garrote, nombre difícil de olvidar para el malaguismo, no fue falta. La pelota le cayó a los pies a Milosevic, que remató sin fe y por allí, debajo de los palos, llegaba Galilea para sacarla. Inverosímil.
Pero ahí se terminó el partido y este nefasto 2023 para el Málaga CF. Con tres puntos, recuperando la tercera plaza y a cinco puntos de Castellón e Ibiza. Llegan días para intentar recuperar a algún jugador, intentar que no caiga ninguno más, y soñar con un 2024 en el Málaga empiece a renacer.