El Málaga CF firmó este sábado una tarde redonda en La Rosaleda, con el mejor partido de las cinco jornadas que lleva la temporada, jugando muy bien al fútbol por momentos, con un ambientazo en las gradas y ganándole 1-0 al Huesca, al que iguala a 9 puntos, con un tanto en propia puerta de Pulido mientras agarraba a Dioni cuando iba a rematar. Además, firma otra portería a cero. Pero sobre todo, con un clínic de Aarón Ochoa jugando entre línea para abrir y romper las dos líneas de cuatro y cinco jugadores muy juntas que plantearon los visitantes. 

De esta forma, el Málaga hace bueno el punto de Córdoba en una tarde emotiva y luctuosa en Martiricos, que pocas horas antes había conocido el fallecimiento de Fernando Puche, expresidente blanquiazul entre 1997 y 2001 con el regreso meteórico a Primera. El minuto de silencio tornó en una ovación muy emocionante de la grada, que también se acordó justo en el arranque de Antonio Hidalgo, en el banquillo del Huesca y artífice del ascenso de 2008 a Primera. Pancartas y cánticos de agradecimiento en la grada de animación. 

Pellicer sólo tocó lo que tuvo que tocar en el once. Metió Ochoa por Dani Lorenzo como única novedad con respecto a Córdoba. El resultado fue muy diferente. Luismi mucho más claro con la pelota, Puga repitiendo prestaciones, Yanis muy activo y, sobre todo, Aarón Ochoa. Sólo tiene 16 años. Da vértigo pensar lo que le espera si nada se le tuerce. 

El Málaga salió como acostumbra, aprentando arriba, pisando el campo contrario, pero a las doce minutos se vivieron 26.669 microinfartos en las gradas. Nelson Monte le daba una pelota a Alfonso Herrero que había descubierto la portería. El balón se paseó por delante del arco con Joaquín Muñoz persiguiéndolo y Einar mandándolo a córner. Instantes después a Alfonso Herrero se le escapó un balón aéreo -noticia- y Asís Reig pitó miedo. 

Pero supo el Málaga cómo ir abriendo vías en la línea de cinco que plantó el Huesca, con otra de cuatro por delante muy juntas. Entre Yanis, Dioni, Ochoa, Cordero y los laterales sumándose en los costados fueron abriendo espacios con llegadas prometedoras a las que le faltaba concretarse como ocasiones. 

En el 17' fue Dioni el que obligó a una estirada a Jiménez después de una triangulación entre Manu Molina y Yanis que acabó en las botas del malagueño. Se la acomodó y sacó el disparo algo forzado. 

En el 27' se atrevió con el disparo Manu Molina con un balón que le había cedido Yanis, muy activo en esos minutos. Seguido una cabalgada de Cordero por la izquierda acabó con un disparo con la zurda que no cogió portería. 

La más clara fue de Yanis Rahamani, que remató duro abajo y Jiménez repelió como pudo con los pies. Entre Nelson, Puga, Manu Molina y Yanis pelearon una pelota por la derecha que acabó en las botas de Dioni, que caracoleó en el área y la bola se le quedó suelta a Rahmani. Pudo ser el 1-0. Como poco después pudo llegar el 1-1 cuando Soko remató alto un balón en el segundo palo que recogió demasiado alto. 

Ochoa -qué barbaridad de futbolista con 16 años- estaba siendo la gota malaya el andamiaje defensivo de Antonio Hidalgo. Aparecía entre líneas, recibía, abría a la banda, caía a la línea de vez en cuando para permutarse con los laterales. En una de esas Dani Sánchez acabó llegando con tiempo para todo a la línea de fondo pero se precipitó al ponerla cuando llegaban tres compañeros. 

Pulido se lo metió con la espalda

Pero a la siguiente llegada ya no pudo más el Huesca. La pelota le lleó a Cordero a la derecha, que había cambiado de banda con Yanis. La puso donde hay que ponerla, donde Dioni forcejeaba con Pulido, que tenía agarrado al de la Colonia de Santa Inés mientras la pelota le daba en la espalda. Y con la espalda se la metió en su portería. 1-0. Encontraba premio el Málaga en el minuto 42. 

La respuesta del Huesca fue inmediata con una balón al área que se fue a córner por poco. El saque de esquina casi se cuela con un gol olímpico. Pero en el 45' justo no hubo tiempo para más. El mejor Málaga del curso. 

Antonio Hidalgo movió ficha con tres cambios en el descanso, dejó una línea de cuatro atrás para un 1-4-3-3. Pellicer mantuvo a Yanis y Cordero a pierna natural, como en los últimos minutos de la primera mitad, lo que mejoró todavía más al Málaga.

Quiso dar un paso adelante el Huesca pero el Málaga seguía viendo las cosas claras. No salió a verlas venir con la ventaja en el marcador y continuó yendo a por el Huesca. Aunque no llegaba tan claro. 

Haitam se vuelve a romper

Herrero midió mal en una salida cerca del córner y tocó el balón con la mano, la jugada siguió y Enrich remató le pegó al aire el centro de Soko cuando no había portero. Baturina cogió el sitio de Dioni en el 60', justo después de que Manu Molina resolviera sin acierto un buen ataque conducido por Ochoa, se fue metiendo hacia dentro desde la izquierda para dejársela al onubense, que llegaba desde atrás. 

Llegaron minutos en los que el Huesca se hizo con el mando del duelo, ganó metros, y el Málaga intentaba salir con balones largos, le duraba menos la pelota. Con Haitam y Juanpe esperando en la banda hubo varios minutos en los que los dos equipos la tenían y la perdían, sin acercarse a las áreas y sin el que el juego se parara. Finalmente se fueron Yanis y Ochoa. Juanpe si situó en la base del triángulo de la medular junto a Luismi y Manu Molina por delante. 

En el 77' Nelson sacó un remate que se colaba tras un detalle de muchos quilates de Joaquín Muñoz al borde del área bajándola y dejándola de tacoón para llegada de Toni Abda por la derecha. Pero seguía el Málaga presionando arriba, con algún desajuste, pero impidiendo que el Huesca se acercara al área con rapidez. Pero faltaba tino con la pelota. 

El Málaga conteniendo al Huesca sin aparentes complicaciones. Y en el 84' llegó otro revés. Haitam había agarrado una pelota que en condiciones normales se hubiese perfilado para soltar un trallazo. Recortó para dentro y la pusa con la derecha. Se rompió otra vez. Poco después se echó al suelo. Entro por él Izan, que se colocó en la derecha, y también entró Castel por Manu Molina. Entre los dos nuevos pudieron fabricar el segundo. A punto estuvieron. Izan la puso desde la derecha perfecta para que Castel se tirara en plancha. La mandó al larguero, que tembló. Cordero y Baturina no acertaron en el rechace.

Kortajarena pudo haber castigado al Málaga en la siguiente pero remató, solo, muy desviado.

El duelo murió con Joaquín Muñoz rematando con la izquierda una falta cerca del córner muy protestada de Izan Merino. Baturina, entre tanto, no podía andar. Pero sonaron los tres silbatazos finales y estalló la grada. Otra victoria y nueve puntos, los últimos tres, sumados por el mejor Málaga de lo poco que va de temporada.