Ibon Navarro estudió ingeniería química. Durante aquellos años aprendió sobre la resistencia de la materia, la transmisión del calor, electrónica y matemáticas. Pero también sobre la gestión de los recursos y las capacidades en un universo que ha pasado a ser ahora el baloncesto. El vitoriano ha demostrado a lo largo de su carrera el saber hacer en los banquillos y su llegada al Unicaja lo ha revolucionado todo. Dirección táctica, jugadas de pizarra, combinación de jugadores, desplazamiento a otras posiciones… todo.
El paso adelante ha sido evidente, aunque los resultados no han sido el gran compañero de viaje: dos derrotas contra Real Madrid (91-92) y UCAM Murcia (87-88), precisamente en el Martín Carpena, y dos victorias en las pistas del Fuenlabrada (53-73) y del Cluj-Napoca en la BCL (70-86). Lo cierto es que nadie podría equiparar lo visto en estos cuatro trámites a lo demostrado durante el resto de la temporada. Ibon Navarro ha recolocado algunas piezas que han llevado a que el Unicaja lo haga todo mejor. Sin embargo, ¿cuáles han sido esas piezas?
La primera de ellas ha sido Axel Bouteille. El francés había jugado con Luis Casimiro y con Fotis Katsikaris en la posición de alero, la que había sido habitual para él en su carrera. Y a pesar de ello, ha sido una de las modificaciones más importantes del nuevo entrenador. ¿Qué supone que el galo juegue en la posición de '2'? El Unicaja tiene la oportunidad de disponer de un quinteto mucho más alto que con Brizuela o Jaime Fernández, precisamente una de las carencias que había demostrado la plantilla hasta ahora por su construcción.
Otro de los cambios más llamativos es Yannick Nzosa y su desplazamiento hacia el '4'. El canterano no ha jugado como pívot en este nuevo tramo cajista, siempre ha estado acompañado por Dejan Kravic o Rubén Guerrero para aportar envergadura a la defensa. No obstante, quien sí que está enseñando sus mejores aptitudes es Jonathan Barreiro. El entrenador ha apostado por el gallego en el puesto de alero y el jugador está respondiendo no siempre acertado en ataque, pero sumando al equipo con otras facetas.
A pesar de todo, el cambio que más ilusión ha generado y mayor impacto ha tenido ha sido Cameron Oliver. Aúna todo lo que el equipo necesita y la afición esperaba: poderío físico en la pintura, gran capacidad en el rebote, músculo en los instantes decisivos y puntos, muchos puntos e incluso desde el triple. El Unicaja ha dado un gran paso adelante en estas facetas. Contra el Cluj-Napoca consiguió 43 capturas y 9 de ellas fueron del reciente fichaje. Así que el "debut" solo fue una antesala de lo que puede suponer este jugador en Liga Endesa.
Es más, Oliver le aporta a Ibon Navarro más variantes en la rotación que ya utilizó en la pista de Transilvania. El estadounidense partió desde el banquillo como '4' junto a Dejan Kravic. Una pintura de muchos centímetros. Sin embargo, una de sus grandes virtudes es la polivalencia. Cuando el partido estaba en un momento crítico antes del descanso y una desventaja de ocho puntos, el técnico vitoriano dispuso de Tim Abromaitis como alero, Carlos Suárez en la posición de '4' y Cameron Oliver como 'center'. Precisamente, un parcial de 0-5 consiguió el Unicaja en poco más de un minuto que estuvieron los tres juntos en pista.
Línea exterior
Ahora bien, el encaje de piezas no solo se ha producido en la pintura. La línea exterior ha tenido movimientos tácticos que no se habían visto en meses. Brizuela y Bouteille, dos jugadores de características muy similares, ya no coinciden en el mismo quinteto. Francis Alonso ha pasado a ser más '3' que el propio francés como recambio de Jonathan Barreiro. Mientras que las parejas base-escolta van cambiando en función de las necesidades del partido.
Sin embargo, esto podría ser un movimiento con fecha de caducidad. En toda esta ecuación falta un jugador con el que Ibon Navarro aún no ha podido contar desde su llegada: Jaime Fernández. El madrileño sufrió una lesión en el sóleo en la primera vuelta de la BCL contra el Filou Oostende y desde entonces no ha jugado. Tampoco lo hará este sábado ante el Gran Canaria, por lo que podría tener una nueva oportunidad el próximo miércoles en Europa.
Aun así, se trata de una pieza sobre la que tendrá que decidir el técnico: ¿será un director o será más un anotador? Aunque antes tendrá que evaluar sobre otras cuestiones y sobre el conjunto de todas ellas. ¿Es Axel Bouteille más útil en el puesto de escolta? ¿Qué es Matt Mooney: el base del Unicaja o un '2'? Si las cosas salen bien, bendito problema, pero son muchas las preguntas que debe solucionar Ibon Navarro, el ingeniero que ha revolucionado el planteamiento táctico del conjunto malagueño.