Málaga, con su mezcla de historia, cultura y belleza natural, es un destino que atrae a visitantes de todo el mundo. Más allá de su centro urbano y sus conocidas atracciones turísticas, la ciudad esconde rincones costeros que ofrecen una experiencia diferente, alejados del bullicio y con un encanto especial.
Estos espacios, poco a poco descubiertos por quienes buscan algo más que las típicas playas abarrotadas, permiten disfrutar del mar en un ambiente personal. En este artículo, exploraremos algunas de estas joyas ocultas que ofrecen un respiro del ajetreo cotidiano.
Playa de los Baños del Carmen
La Playa de Los Baños del Carmen, situada al este del centro histórico de Málaga y a un corto paseo de la popular Playa de la Malagueta, es un rincón cargado de historia y encanto. Conocida localmente como "el Balneario", esta playa ofrece una experiencia única que combina la nostalgia de su pasado con la belleza natural de la costa malagueña.
Inaugurada en 1918 como un balneario de lujo, Los Baños del Carmen rápidamente se convirtieron en un centro de ocio para las clases altas de la época, rompiendo con las tradicionales normas de baño segregado. Durante la “belle époque malagueña”, el lugar fue un punto de encuentro para conciertos y verbenas que marcaron los “felices años 20”.
Hoy en día, aunque conserva ese aire nostálgico, la playa sigue siendo un lugar popular, con un chiringuito que ofrece una terraza espectacular y una zona de grandes árboles que proporciona sombra ideal para picnics.
La playa tiene arena oscura y gruesa, y sus aguas claras son perfectas para nadar, permitiendo a los visitantes disfrutar de una rica fauna y flora marina. Aunque la zona es frecuentada por bañistas, especialmente en verano, su ambiente sigue siendo acogedor, lo que la convierte en un lugar especial dentro de la ciudad.
Además, cerca de la playa, se encuentra el Parque del Morlaco, un pequeño oasis verde donde se pueden disfrutar de rutas a través del monte con vistas espectaculares de la costa.
Playa de Sacaba
La Playa de Sacaba, situada en el extremo oeste de Málaga entre la desembocadura del río Guadalhorce y la Playa de la Misericordia, es un rincón tranquilo que contrasta con el bullicio de otras playas de la ciudad.
Con 750 metros de longitud y 60 metros de anchura, es conocida por su ambiente sereno, en gran parte gracias a su ubicación junto a una antigua zona industrial que está en proceso de transformación, lo que la ha mantenido con una baja densidad de población.
A pesar de su proximidad a la ciudad, Sacaba conserva un carácter casi oculto, rodeada de un entorno que está en pleno proceso de revitalización. La única urbanización en la zona, Sacaba Beach, construida en los años 60, aporta un toque de nostalgia a este paisaje costero que se mantiene relativamente inalterado. Este ambiente hace que Sacaba sea una opción ideal para quienes buscan escapar de las playas más concurridas sin alejarse demasiado del centro urbano.
Aunque no cuenta con los mismos servicios que otras playas más populares de Málaga, su tranquilidad y la amplitud de su extensión la convierten en un lugar atractivo para disfrutar del mar en un entorno más relajado. Además, cuenta con calas especiales donde están permitidos los perros.
Playa del Peñón del Cuervo
La Playa del Peñón del Cuervo, situada en las afueras de Málaga, es uno de esos rincones que, aunque no tan conocidos como otras playas de la Costa del Sol, capturan el corazón de quienes buscan una experiencia más auténtica y natural. Su nombre proviene del imponente peñón que emerge del mar y divide la playa en dos partes.
Con una extensión de unos 450 metros, esta playa es ideal para quienes buscan alejarse del bullicio de las zonas más urbanizadas. Su arena es gruesa y oscura, y las aguas que la bañan son transparentes, ofreciendo un ambiente perfecto para un día de relax. A diferencia de las playas más céntricas, el Peñón del Cuervo carece de chiringuitos y otros servicios habituales, lo que refuerza su carácter más salvaje y menos explotado turísticamente.
Una de las grandes ventajas de esta playa es su amplia zona de parking, que incluye espacio para autocaravanas. La playa cuenta con una zona específica para estas actividades, equipada con mesas, sillas de madera y barbacoas de obra para uso público haciendo de este lugar un punto de encuentro ideal para familias y grupos de amigos.
Además de su atractivo natural, la playa es un lugar excelente para disfrutar de eventos al aire libre, como conciertos y reuniones nocturnas, especialmente en verano. Y si te quedas hasta el atardecer, el paisaje que se despliega ante tus ojos será el broche perfecto para un día inolvidable en esta joya oculta de la costa malagueña.