Se deshojó la margarita. El consejo de Administración de Unicaja Banco ha aprobado este viernes la entrada de José Sevilla como consejero independiente de la entidad y su futura designación como presidente no ejecutivo cuando sea ratificado en la próxima junta general, que tendrá lugar en marzo o abril. La designación ha sido por unanimidad.
Así lo ha comunicado Unicaja Banco en un hecho relevante a la Comisión Nacional del Mercado de Valores. Sevilla trabajó en el BBVA entre 1997 y 2009, siendo consejero de BBVA Bancomer (México) y miembro del comité de dirección, entre otros cargos de responsabilidad. En 2012 dio el salto a Bankia como consejero ejecutivo y director general, y desde 2014 fue consejero delegado. Su vinculación con Bankia terminó en 2021 tras ser absorbida por Caixabank. En este último periodo ha sido consejero de Renta 4.
Sevilla será el nuevo presidente no ejecutivo del quinto mayor banco español en sustitución de Manuel Azuaga, que dejó Unicaja Banco el pasado mes de noviembre tras haber permanecido más de 30 años en la entidad. El CEO es Isidro Rubiales, que accedió al puesto en verano tras la salida pactada con Manuel Menéndez. De esta forma, Unicaja Banco ha cambiado la cúpula del consejo de administración en apenas un año al tener ahora nuevo presidente y nuevo CEO.
José Sevilla ya estuvo en las quinielas para ser elegido CEO del banco malagueño. No obstante, y teniendo en cuenta los numerosos problemas que habían surgido tras la designación de Menéndez vía Liberbank, se prefirió nombrar a alguien de la casa y Rubiales era una persona de la máxima confianza de Azuaga. De hecho, Rubiales lleva tres décadas en Unicaja Banco y ha pasado prácticamente por todos los departamentos tras haber sido director de Contabilidad, director de la División de Control, director general de Control, Estrategia y Relación con Supervisores y director general Adjunto al Presidente de Control y de Relación con Supervisores. Tras los problemas de gobernanza con Liberbank, los experimentos con gaseosa.
Pero la vida da muchas vueltas, el perfil de Sevilla gustaba en Unicaja -especialmente en la Fundación Unicaja, máxima accionista del banco malagueño con un 30% de los títulos- y le ha llegado ahora la oportunidad. La salida de Azuaga en noviembre hizo que se empezara a buscarle sustituto y el currículo del ex consejero de Bankia ya estaba sobre la mesa.
El nombramiento de José Sevilla como presidente no ejecutivo tiene ahora que obtener las autorizaciones regulatorias y ser ratificado en la Junta General de Accionistas, aunque no se prevé que haya ningún problema. En Unicaja Banco se ansía volver a la normalidad -tras dos años de lucha interna entre los consejeros de Unicaja, los de Liberbank y los de la Fundación Unicaja que apoyaban a Liberbank- y centrarse en el negocio, alejado de unos focos mediáticos que nunca le han gustado ni al anterior presidente, Braulio Medel, ni a su sucesor Manuel Azuaga. Habrá que ver qué perfil público quiere tener Sevilla, aunque recordando siempre que las decisiones las toma Rubiales como CEO.
En el Ibex 35 la designación de Sevilla no ha tenido un efecto especial. Ayer ya se estimaba que, salvo sorpresa mayúscula, el ex consejero de Bankia iba a ser nombrado hoy y, pese a eso, la acción de Unicaja cayó un 0,7%. En el inicio de esta jornada de viernes el valor del título también va ligeramente a la baja.