Cuando dejamos que la inteligencia artificial tome una decisión por nosotros, suele usar parámetros más o menos objetivos: en Google Maps, el camino más corto o menos contaminante; en Netflix, las series o películas más vistas; o en un periódico, los artículos más leídos.
Un paso más allá se da cuando el usuario interactúa con la aplicación o página web y permite que se analicen sus registros. En ese momento, la máquina puede analizar qué te ha interesado en el pasado para proponerte contenido o soluciones similares en el futuro, independientemente de si sean los más consumidos de forma global o no.
Knowdle, compañía fundada en 2014 por los veteranos del sector en España Felipe y Pedro García, basa su propuesta de valor en la inteligencia colectiva, que va un paso más allá: quiere tener en cuenta también las preferencias de las personas que nos resultan influyentes en nuestro entorno a la hora de recomendarnos productos. Un aproximación ambiciosa y novedosa que tiene en Málaga la sede de su sucursal de tecnología financiera o fintech.
La CEO de Knowdle Fintech, la empresaria de origen kazajo Yenlik Doskempirova, explica a EL ESPAÑOL de Málaga que conoció la empresa matriz en verano de 2018 en un curso de inteligencia artificial colectiva organizada por el Polo de Contenidos Digitales. "Pensé que era muy aplicable al mundo financiero, comenzamos a estudiarlo y acabamos encontrando las claves", subraya. 
Define su compañía como "la única capaz de medir realmente el valor de los datos": al centrarse en los efectos de la manera de consumir de una persona sobre otra de su entorno, se centran en cuál es la capacidad de influencia de cada consumidor. El usuario cede la información de sus pautas de consumo a la compañía y, a cambio, recibe una cantidad de dinero variable según cuánto influyan sus datos al consumo de otras personas. Un humilde periodista joven quizás no lograra grandes cifras, pero influencers o creadores de contenido en Internet podrían prácticamente sostenerse solo mediante este sistema, plantean desde la compañía.
"La última versión del algoritmo permite calcular lo que tu influencia en el colectivo aporta al bien común, y compensarte con dinero. No es un simple cashback como hacen la mayoría… Realmente mide tu influencia en mis decisiones y te paga sin apenas darte ni cuenta", defiende Doskempirova.
Knowdle Fintech forma parte de la aceleradora de empresas emergentes La Farola, que les ha ayudado sobre todo a "hacerlo fácil de entender": "No hay que hablar de inteligencia artificial, sino de lo que la inteligencia artificial hace para ayudarte". Es por ello que ponen el foco en que su algoritmo es "complejo", pero lo fundamental es que el usuario "no tiene que hacer nada". Resumen esa filosofía en un eslogan: "Deja que los robots trabajen para ti".
"Así es, ellos te avisan y te recomiendan no solo las mejores ofertas que mejor se ajustan para ti, tu familia, tus amigos o tu empresa. Es que a la vez, te hacen ganar dinero sin necesidad de preocuparte por ello", explica la primera ejecutiva de la fintech sobre la aplicación de su inteligencia colectiva a la gestión financiera de las empresas: "La vida es cada día más compleja, contratos más complejos, mayor oferta de productos, letra pequeña... No da tiempo a ti. Knowdle lo hace por ti".
La decisión fundamental en toda su propuesta es la del usuario de ceder sus datos: "El compartir conocimiento es como compartir amor. El amor y el conocimiento son multiplicativos. Nuestro algoritmo lo mide escuchándote, observándote, viendo el resultado de tus decisiones...", argumenta. Aseguran que la protección de esos datos está asegurada porque la combinación de inteligencia artificial y machine learning permite "detectar actividades sospechosas de manera prácticamente inmediata"
"Es más, borramos los datos. Lo importante es cómo el dato modifica la toma de decisiones para mejorar nuestras decisiones financieras... Crear un mapa cognitivo y semántico lo cambia todo. Lo más importante es cómo tu próxima decisión afecta a tus decisiones futuras. Eso es lo que guardamos en el mapa cognitivo", justifica Yenlik Doskempirova, tras lo que subraya que su fintech está en plena ronda de financiación y en busca del inversor malagueño.