La joven comunidad de emprendedores Málaga Tech sigue trayendo actores esenciales para las empresas emergentes o startups de la Costa del Sol. La red internacional de inversores CORE Angels está presente estos días en la ciudad a través de intensas jornadas en la que han tomado el pulso del hub y han salido satisfechos con la calidad de las jóvenes ideas. Una visita que puede ser clave para las compañías pujantes que notan que les falta inversión para terminar de afianzarse.
Así lo ha explicado en conversación con EL ESPAÑOL de Málaga el fundador de CORE Angels Madrid Guillermo Soto Ugalde, que ha relatado que se reunieron este jueves con en torno a seis startups y planean hacer lo propio en días siguientes. ¿Su deseo? "Ojalá salgan proyectos en los que pronto estemos invirtiendo".
La inversora de talento Demium, artífice de muchas de esas jóvenes compañías más prometedoras, ha sido la primera parada de estos inversores que apuestan por mantener el espíritu del ángel inversor o business angel que se implica en el desarrollo de las empresas emergentes más allá de poner el dinero.
Justamente, el gancho para atraerles ha sido la relación de financiación que estos inversores ya tienen con Kaikoo, la startup de entrenamiento de esports de Juan Antonio Tejada, a su vez uno de los impulsores de la comunidad Málaga Tech. Como ya ocurriera con el despacho de abogados especializado Delvy, ahora presente en el ecosistema, les han servido de puente para introducirse ante las jóvenes startups.
"Apetece ver qué tipo de proyectos hay aquí. Conectados con Demium y con Juan, se nos presenta esta oportunidad y venimos encantados a escuchar", indica Soto. Wains, Epsiloom, Voicit, Onversed, Paua, Invertor, Coolx, Origin Algae, pigik y Zexel son las empresas con las que han establecido un primer contacto en formado de speed dating, una especie de rápida "primera cita" empresarial.
"Ideas me han gustado todas", cuenta el fundador de CORE Angels Madrid, aunque con necesidad todavía de madurez: "Los proyectos que hemos visto están en fase muy temprana". Les ha quedado todavía por evaluar en detalle la "determinación" y el "compromiso" de los emprendedores de dichas empresas.
Soto afirma que no todas las que han visto son "invertibles" y algunas de ellas, aunque —desde su perspectiva— puedan no tener el potencial de multiplicar su valor de forma muy acelerada, tienen un perfil de inversión más segura: no necesariamente serían el nuevo Freepik, pero funcionarían.
"No todo es llegar a ser Google, Amazon, Tesla o la que quieras. Una startup, con que sea una empresa que vaya bien, ya es un éxito. El 90% de las startup desaparecen antes de los cinco años. Tiene que haber un porcentaje muy pequeño que vaya muy bien, pero lo que se necesita es muchas que lleguen a ser de tamaño medio", argumenta Guillermo Soto Ugalde.
"Creo de verdad que Málaga va por muy buen camino. Fuera de Madrid y Barcelona, hay algunas ciudades que lo están haciendo particularmente bien: Valencia es una y Málaga, otra", sentencia.