El malagueño José Florido está desarrollando una carrera impresionante en la meca de la tecnología: Silicon Valley. Lleva 12 años viviendo y trabajando para grandes multinacionales, entre ellas Google y Facebook, y acaba de ficharlo Spotify como Director de Diseño de Producto, es decir, que ha pasado a ser uno de los jefazos de la mayor plataforma musical en streaming del mundo.
"Gestiono todo el área de publicidad para marcas, promoción de música y podcasts. Ahora tengo una posición que me permite tener mayor influencia y visibilidad de la estrategia de la empresa a medio y largo plazo y me centro principalmente en dos áreas: desarrollo del negocio publicitario y diseño equitativo", explica Florido en una entrevista con EL ESPAÑOL de Málaga.
Su fichaje por Spotify es el resultado de una exitosa carrera que empezó a fraguarse en 2004, recién terminada su licenciatura en Económicas en la Universidad de Málaga, cuando empezó a trabajar como diseñador y community manager en Ioquo.com, que fue adquirida por EBay en 2005. Previamente, dentro de su etapa de estudiante, fundó Avidos, aunque su gran salto, el que le cambió la vida, se produjo en 2006 cuando montó Panoramio con sus amigos Joaquín Cuenca y Eduardo Manchón, una plataforma donde se exponían fotografías de lugares y paisajes.
Fue tal el éxito que Google compró Panoramio en julio de 2007 y ahí arrancó la carrera internacional de Florido entre multinacionales. "Entré a trabajar en Google tras la venta de Panoramio pero primero estuvimos destinados en la oficina de Zúrich. Allí estuvimos unos tres años y fue entonces cuando mi mujer, Ana Belén Ramón, que también trabajaba en Google como diseñadora, tuvo la oportunidad de trasladarse a Mountain View en California para trabajar en la sede central de Google en el equipo de búsqueda (Google Search), que es uno de los más importantes en la compañía. Esto era en 2010 y nos mudamos a California", señala.
Una vez llegado al corazón del Silicon Valley, Florido no desaprovechó el tiempo. "Estuve primero un año en Google Maps ayudando a finalizar la integración de Panoramio en Google+ primero y finalmente como parte de la comunidad de expertos locales de Maps. Después de esto me uní a Niantic para crear juegos móviles sobre mapas (empezó como un equipo de Google) y allí monté el equipo de diseño que llevó a cabo el primer juego de la empresa, llamado Ingress y cuyo sucesor fue Pokémon Go", explica.
Una de las características de Silicon Valley y, en general, del mercado laboral estadounidense es que hay mucho cambio, una ebullición de proyectos y oportunidades y nadie se casa con nadie. José Florido y su esposa Ana Belén Ramón lo aprendieron rápido y decidieron crear su propia empresa. "Poco antes de lanzar Pokémon Go la empresa se separó de Google y yo decidí salirme y volver a emprender de nuevo. Mi mujer había dejado Google unos meses antes y había creado Wepoke. Yo me uní a ella y montanos la empresa desde San Francisco", recuerda a este diario.
Wepoke es, como comenta Florido, "un laboratorio de ideas y proyectos web y móvil donde creamos, de principio a fin, proyectos propios que explotamos comercialmente. Funcionamos como un publisher de contenido que acumula tráfico en una red de sitios web y lo monetiza mediante publicidad online". Lo lanzaron en 2012 y una década después sigue en la cresta de la ola bajo la dirección de Ramón.
Florido decidió retomar su trayectoria profesional en multinacionales y fue contratado en abril de 2020, justo en el inicio de la pandemia por el Covid 19, por Flexport como manager de diseño de producto, donde estuvo trabajando hasta junio de 2021. La razón del cambio: le llamaron de Facebook para ser también manager de diseño de producto. En la empresa liderada por Mark Zuckerberg fue encargado de varios equipos de diseñadores e investigadores en el área de moderación de contenidos, respuesta a crisis y problemas de desinformación (fake news).
Al malagueño se lo rifan y prueba de ello es que, apenas un año después de entrar en Facebook, en agosto fue fichado por Spotify como directivo, un salto más en la carrera de este profesional que no solo ha caído de pie en el competitivo mundo de Silicon Valley sino que se ha adaptado perfectamente a la comunidad. Tanto que incluso ha ganado un campeonato de ensaladilla rusa y ha quedado segundo en un concurso de tapas. "¡Es que hago una ensaladilla rusa súper buena con gambas! Hay un grupo grande de españoles en Silicon Valley, nos conocemos, somos amigos y organizamos estos concursos", afirma entre risas.
Florido vive a 9.570 kilómetros de Málaga pero eso no le impide estar al día del crecimiento de Málaga como referente tecnológico a escala europea e incluso mundial. Y defiende que cada ciudad debe llevar su propio modelo, sin comparaciones. "No estoy seguro que seguir otros modelos sea la mejor apuesta. Me gusta más ver como surgen modelos diferentes con su propia forma de hacer las cosas. Y un ejemplo es el ecosistema de empresas de tecnología en Málaga donde vemos empresas de impacto enorme (Freepik, Besoccer, Uptodown, VirusTotal, etcétera) que han surgido de manera muy diferente y sin la necesidad de apoyarse en capital riesgo. Identificar estos fenómenos y apoyarlos sí me parece muy importante", resalta.