Mark Francis Roberts era uno de los delincuentes fugados más buscados del Reino Unido hasta este pasado miércoles, cuando fue arrestado en la localidad malagueña de Estepona.
Una operación coordinada entre las fuerzas de seguridad británicas y españolas ha conseguido dar con el paradero de este hombre, que se dio a la fuga hace siete años y está acusado de intento de robo y de provocar daños corporales graves.
Según informó la británica Agencia Nacional del Crimen, el detenido, de 29 años, permanece bajo custodia a la espera de que se desarrolle el procedimiento para su extradición.
La última vez que se supo de él, se ubicaba en Fairfield, al oeste de Liverpool. Las fuerzas de seguridad británicas sospechan que Roberts participó en un intento de robo el 30 de septiembre de 2016.
Ese día, pasada la medianoche, dos personas abordaron a un hombre que acababa de aparcar su coche frente a su casa con la intención de sustraerle un reloj valorado en 60.000 libras (69.000 euros). La víctima se resistió a entregárselo y los hombres lo atacaron con un cuchillo, provocándole graves heridas que estuvieron cerca de acabar con su vida.
"La detención de Roberts se produjo gracias a una persistente campaña para rastrearle y al gran trabajo de la Guardia Civil", afirmó en un comunicado Steve Reynolds, responsable de la agencia británica para España.
El nombre de Roberts aparece en la lista que la NCA difundió el pasado mes de febrero con el fin de que la ciudadanía española ayudara a encontrar a siete de los fugitivos más buscados del país y que, según se sospecha, pueden estar ocultos en España.
La lista difundida está integrada por siete hombres, de los que se sospecha que tienen algún vínculo en España e, incluso, de algunos hay pistas de que puedan encontrarse o han estado en lugares concretos como Marbella u otros lugares de la Costa del Sol.