Casi 16 años después de que se diesen los primeros pasos para impulsar la construcción en Estepona de una nueva urbanización con 1.800 viviendas, la operación supera un trámite decisivo. La Junta de Andalucía acaba de emitir la Autorización Ambiental Unificada favorable al proyecto de urbanización de los terrenos del sector Saladavieja, con una superficie de 410.575 metros cuadrados.
De esta extensión, la mayor parte está en manos de la Fundación Antonia Guerrero, propietaria de dos parcelas con una superficie aproximada de 312.000 metros cuadrados, lo que representa el 75,29% del total.
La aprobación definitiva del Plan de Ordenación del sector SUP-R-1 Saladavieja data del 23 de mayo de 2008. Su aprobación permitió avanzar en la aprobación de los proyectos de reparcelación y urbanización. La ejecución material de las obras de adecuación se estima en algo más de 23 millones de euros, siendo el plazo previsto de 24 meses.
En el marco del proyecto de reparcelación, entre otras parcelas de uso residencial, la Fundación se ha adjudicado una parcela de 24.876,74 metros cuadrados, "con destino a equipamiento privado cultural docente".
Entre los condicionantes que han de ser teniendo encuentra en el desarrollo de la operación destaca la necesidad de realizar una prospección arqueológica previa en toda la superficie afectada para comprobar la existencia de restos arqueológicos y cuyos resultados condicionarán la posible ampliación de medidas.
A esto se suma la necesidad de realizar un georradar previo y sondeos de diagnosis en el polígono establecido para el yacimiento Las mesas de Saladavieja "para establecer la delimitación fehaciente del área nuclear hasta cota de afectación o, en su defecto hasta cota estéril".
Se da la circunstancia que buena parte de los suelos del sector se vieron afectados en 2022 por incendio que calcinó cualquier hábitat existente. De hecho, los informes apuntan la inexistencia de flora y fauna protegidas. Pese a ello se remarca que de encontrarse especies "amenazadas no previstas", las actuaciones serán paralizadas de inmediato.
El proyecto de urbanización precisa que en la actualidad la finca cuenta con accesos rodados desde la urbanización colindante por el sur, Urbanización Seghers; por el norte, desde la urbanización de reciente construcción del Sup-R10 Ampliación Zona de Servicios; y por el este, desde camino de acceso al núcleo de Las Mesas y nueva urbanización Sup-R4; los cuales se convierten en carriles de tierra dentro de la finca, carriles que desaparecerán con la urbanización de la finca sustituidos por la nueva red viaria proyectada.
El Plan General de Estepona prevé un viario estructurante atravesando el sector desde el noreste al suroeste por la parte sur de la finca, hasta enlazar al oeste con el vial más oriental del Sector UPP-R1 Seghers y con la calle Fresa en la zona intermedia.
Prevé así mismo una rotonda de conexión en la zona este que hace de enlace del vial anterior con otro vial planteado en el PGOU dentro del Sector, cerca de su borde más oriental, en sentido sur-norte, con el que se comunican entre sí el Polígono Industrial de Estepona y la nueva urbanización Sup-R4 “Las Mesas”, atravesando los sectores Sup-R3 y SG-R3-SUP.
Al norte del sector, el PGOU plantea otro vial en sentido este-oeste cuya ejecución se comparte al 50% entre los sectores Sup-R10 y el nuestro, Sup-R1, cuya prolongación hacia el oeste cruza por encima de la autovía A-7.