El Ayuntamiento de Málaga abre la puerta a recurrir judicialmente el informe emitido por el Ministerio de Cultura contra la construcción de la torre del puerto. El alcalde, Francisco de la Torre, ha calificado de "chocante" el pronunciamiento emitido por el departamento ministerial y ha calificado de "muy forzada y artificial" alguna de las argumentaciones empleadas. Y ha precisado que la localización prevista para el edificio, junto al dique de levante, se encuentra a más de un kilómetro del casco antiguo.
"Defenderemos el proyecto y trataremos de que salga adelante por lo que aporta a la ciudad y por la seguridad jurídica", ha explicado el regidor al ser preguntado este martes. Sobre ello, ha cuestionado que se pueda generar cierta incertidumbre de cara al exterior con un planteamiento como el actual, cuando podría haberse emitido con anterioridad.
El camino ahora planteado por el mandatario local coincide con el anunciado ayer por la Autoridad Portuaria, que también apuntó la posibilidad de acudir a la vía contencioso-administrativa.
De la Torre se ha mostrado "sorprendido" por las conclusiones recogidas en el expediente, que a su juicio no coinciden con las razones esgrimidas por el secretario general del ministerio cuando le informó del inicio del informe.
En sus dudas sobre la labor de Cultura, ha dicho que quiere saber si actuó de manera semejante ante el proyecto del hotel Vela, en Barcelona, o de la torre Pelli, en Sevilla. "Quiero ver si hay antecedentes", ha añadido.
Preguntado por la posible incidencia que este trabajo puede tener sobre el pronunciamiento final del Consejo de Ministros, al que compete validar o no la excepcionalidad del uso hotelero en terreno portuario, el alcalde ha sido claro: "Esperamos tener un trato no distinto al que se dio a Barcelona".
Frente al pensamiento municipal, que se mantiene firme en la idea de que "no hay afectación al Centro histórico", Cultura entiende que existen “indicios suficientes de expoliación” en el supuesto de que la torre se ejecutase.
El levantamiento de la misma, arguye, "alteraría de manera irreversible el paisaje histórico" que caracteriza al Centro de la ciudad y la relación de ésta "con el mar y la contemplación conjunta de ambas".