Importante jarro de agua fría en la apuesta del Ayuntamiento de Málaga por sacar los camiones de carga y descarga del Centro Histórico y utilizar, en su lugar, vehículos eléctricos. La imposibilidad de llegar a un acuerdo con la Junta de Andalucía para comprar una parcela en la calle Gigantes, en el casco urbano, sobre la que construir el Centro Urbano de Distribución Ecológico (CUDE), ha obligado a la ciudad a renunciar a una subvención de 2.158.252 euros otorgada por la Unión Europea.
La pérdida de esta suma no cierra la puerta a que el Consistorio pueda ir adelante con la ejecución de estas instalaciones, pero sí la dificulta de manera clara. La suma consignada mediante fondos comunitarios iba a permitir sufragar el 30% de toda la inversión necesaria, fijada en unos 6,6 millones.
Al respecto, el concejal de Movilidad, José del Río, confirma que los técnicos municipales ya estudian alternativas con las que compensar esta vía de financiación. Aunque ha insistido en que antes tiene que quedar resuelta la disponibilidad del suelo.
Los detalles vienen recogidos en uno de los puntos del orden del día del Consejo de Administración de Smassa, en la que el Consistorio está representado con un 51%, que tiene lugar este jueves.
En el mismo se justifica la decisión adoptada, que tuvo lugar a finales del pasado mes de julio, en la imposibilidad de cumplir con los plazos marcados por la convocatoria europea. La misma obliga a que las instalaciones estuviesen listas antes de marzo de 2022, siendo el tiempo de obra estimado de 18 meses.
El proyecto municipal incluye un edificio con dos plantas, una planta baja de gran altura (equivalente a tres plantas) y una planta sótano. Igualmente, la cubierta dispondrá de lucernarios conformados por placas solares para aprovechar así al máximo la iluminación natural y producir ahorro de energía.
El objetivo es crear un equipamiento comunitario con un centro de distribución en el Centro para el reparto de mercancías con vehículos eléctricos o sistemas alternativos no contaminantes. Así, se eliminarán los medios de transporte contaminantes, se liberarán espacios urbanos destinados a carga y descarga, se facilitará la movilidad y la accesibilidad peatonal y se mejorará la convivencia entre el reparto de mercancías y la ciudadanía.
Cabe recordar que Málaga en el año 2004 ya dispuso de un sistema "última milla" único en España para el transporte de mercancías en el Centro, mediante vehículos eléctricos con puntos de recarga. Este primer proyecto fue pionero en España creando un Centro Logístico de Distribución Ecológica (CUDE) situado en el aparcamiento municipal de Camas en el centro de la ciudad.