El futuro inmediato de la torre del puerto de Málaga pasa por las manos del Consejo Consultivo de Andalucía. El pronunciamiento de este órgano, dependiente de la Junta de Andalucía, se antoja clave en el devenir de la propuesta de construcción de un hotel en los suelos portuarios situados junto al dique de Levante. Y más en concreto, a la hora de perfilar la tramitación final del ajuste urbanístico necesario para dar encaje legal a la operación.
Ante la evidente discrepancia existente entre el Ayuntamiento y Puertos del Estado respecto al modo de proceder para levantar el veto que pesa sobre el uso hotelero en los espacios portuarios, el Consistorio opta por elevar una consulta de carácter jurídico al Consultivo.
De manera precisa, según ha aprobado este viernes la Junta de Gobierno Local, se le solicita un pronunciamiento que permita dirimir el conflicto actual entre las dos entidades.
Hay que recordar que Puertos del Estado, en un reciente informe, sostiene que antes de que el asunto llegue a la mesa del Consejo de Ministros, que tiene la potestad de levantar la prohibición del uso hotelero, el Pleno municipal debe aprobar definitivamente la modificación urbanística necesaria y publicarla, de manera que la misma entre en vigor.
Por el contrario, los servicios jurídicos municipales opinan de manera diferente. En concreto, entienden que la publicación de la aprobación definitiva debe quedar condicionada a que previamente el Consejo de Ministros acuerde autorizar el uso hotelero sobre los terrenos.
En su reclamación al Consultivo, el equipo de gobierno solicita también saber si la Administración estatal es competente a la hora de condicionar la tramitación urbanística de un proyecto de esta naturaleza.
El movimiento ahora autorizado por la Junta de Gobierno Local, el mismo que ya dio luz verde de manera inicial y provisional al expediente, se produce un mes después de que se conociesen las trabas por parte de Puertos del Estado.
El escenario en el que se mueve actualmente la partida del hotel del puerto es ciertamente convulso. Porque a las dudas ya expresadas por Puertos del Estado hay que sumar la posición contraria ya manifestada por parte del Ministerio de Cultura a la construcción de la torre, dado el impacto que podría general sobre el paisaje de la ciudad. Un asunto, en cualquier caso, que está pendiente de quedar resuelto y que ha motivado la apertura de un expediente por posible expolio al patrimonio.