El Ayuntamiento de Málaga no ceja en su empeño de hacerse en propiedad con una de las últimas parcelas libres del litoral oeste de la ciudad. Una pastilla de oro situada en la calle Pacífico, a escasos metros de Tabacalera y del suelo sobre el que en los próximos años se levantará un gran edificio de oficinas de más de 9.000 metros cuadrados de techo.
Y en pro de lograr este objetivo, el equipo de gobierno prosigue con los contactos con la actual dueña del inmueble: la Tesorería de la Seguridad Social. Los mismos se alargan desde principios del año pasado, sin que hasta la fecha se haya resuelto la operación. Pese a ello, el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, confirma que se siguen dando pasos en el proceso de acercamiento.
Queda, no obstante, el detalle fundamental: fijar el precio de la compraventa. De acuerdo con los movimientos hasta ahora conocidos, y según relata el edil, desde la Tesorería de la Seguridad Social se remitió un escrito al Consistorio cifrando el valor en el que tasa el bien. O lo que es lo mismo, poniendo negro sobre blanco lo que a su entender cuesta ese solar.
Ante la comunicación oficial, los técnicos de Gerencia de Urbanismo se encuentran "contrastando" actualmente la oferta realizada, con el objeto de confirmar que la misma encaja con el estudio de valoración propio que está haciendo el organismo municipal.
Si bien el edil elude fijar el precio planteado por el organismo estatal, sí reconoce que es inferior a los 8,7 millones de euros abonados en su momento por el Gobierno para hacerse con este suelo, entonces de titularidad municipal. "El ayuntamiento afronta la opción de recuperar ese terreno como real; hay firme voluntad de adquirirlo y estamos tratando de ponernos de acuerdo en la cuantía", ha precisado López.
EL ESPAÑOL de Málaga ya desveló el pasado mes de agosto el deseo del Consistorio de hacerse con un suelo de 8.775 metros cuadrados de superficie que desde hace 16 años se encuentra absolutamente inoperativo.
La parcela está estratégicamente situada en segunda línea de playa. De hecho, fue donde el Gobierno proyectó la construcción de una sede del Instituto Nacional de la Seguridad Social, plan que mantuvo vigente hasta finales de 2019. En ese momento renunció a ir adelante con una operación que llegó a evaluar en unos 60 millones de euros.
El primer movimiento en esta especie de partida lo dio el propio responsable de Urbanismo cuando a inicios de 2021 remitió un escrito a los responsables del ente estatal ofreciéndose a alcanzar un acuerdo de compra.
De acuerdo con el Plan General de Ordenación Urbanística (PGOU), este espacio está calificado como equipamiento, lo que limita sus posibles destinos. Pese a ello, además de un destino institucional se abre la puerta a usos educativos, formativos y culturales.
Lo que se ha quedado en el camino en estas décadas es la apuesta por edificar un complejo administrativo que hubiese dado cabida a unos 2.000 empleados. Las dificultades económicas hicieron mella en las previsiones del Gobierno, hasta el punto de que en 2012 se supo que el Instituto Nacional de la Seguridad Social buscaba rebajar el coste.
El diseño se caracterizaba por tener forma de L, incluyendo dos pabellones diferenciados para la Dirección Provincial, la Intervención Delegada Territorial, el Servicio Jurídico Provincial y una Oficina Integral de la Seguridad Social. Al tiempo, se dibujaba un edificio circular para guardería, así como otras instalaciones.