Málaga

El Basque Culinary Center (BCC), una de las más prestigiosas academias gastronómicas de todo el mundo, se ha convertido en una opción abierta para dar vida a la antigua cárcel de Cruz de Humilladero, en Málaga capital.

Según ha podido saber EL ESPAÑOL de Málaga, representantes de la institución académica protagonizaron hace pocos días una visita a las instalaciones municipales con el objetivo de conocer de primera mano las superficies disponibles en el inmueble.

Sea como fuere, se trata de una vía abierta que tiene aún que madurar y concretarse. Sobre ello, fuentes del Basque consultadas por este periódico no han negado tal visita y han confirmado que en este momento "se están explorando diferentes opciones y manteniendo diferentes conversaciones". 

"No hay nada en firme", han aclarado, para añadir: "Para nosotros Málaga es un referente a nivel gastronómico y tenemos un canal abierto de conversación pero no se ha avanzado nada más". Muestra de estos es que el que el pasado 16 de diciembre mantuvo el concejal de Ordenación del Territorio, Raúl López, por videoconferencia con responsables del instituto, tal y como queda reflejado en su agenda pública.

Lo que sí apuntan otras fuentes consultadas es que en el supuesto de que el acercamiento entre las dos partes sea definitivo, el BCC pasaría a ser uno de los inquilinos que darían contenido a la vieja prisión, sobre la que existe un proyecto de intervención bautizado como Distrito 6.

Las amplias dimensiones físicas del equipamiento hacen factible que convivan en el mismo las propuestas de artes escénicas, audiovisuales, de literatura y música, muchas vinculadas al Festival de Cine, y otros operadores

Hay que recordar que más allá del uso cultural previsto en origen, el deseo del distrito es que el edificio dé cabida a proyectos que permitan revitalizar el barrio. Así lo expresó hace unas semanas la concejala Teresa Porras. "Lo que quiere el distrito es algo que mueva gente", afirmó. Una pretensión que podría cumplir el Basque.

Hace casi diez años que Málaga recibió las llaves de la antigua cárcel después de alcanzar un acuerdo con el Gobierno central. Desde aquel primer momento, son varias las alternativas de uso puestas sobre la mesa para recuperar su uso. Por el momento ninguna ha cristalizado. 

El modelo de Matadero de Madrid

Pese a la demora, desde el equipo de gobierno insisten en que Distrito 6, que cuenta con la colaboración directa de Carlos Baztán, uno de los promotores del centro cultural Matadero, en Madrid, sigue viva. La inversión necesaria ronda los 24 millones de euros. Para rebajar esta carga, se plantea su materialización por fases. 

La reciente publicación por parte del Gobierno central de dos vías de financiación mediante los fondos Next Generation de obras de rehabilitación en edificios públicos y equipamientos abre la puerta a la inclusión de la antigua cárcel. De hecho, en el seno del Consistorio están explorando esta posibilidad y analizando si la operación cumple los requisitos planteados.

No es la primera ocasión en la que se vincula a la Basque con Málaga. Hay que remontarse al año 2016 cuando la Diputación provincial y la institución vasca firmaron un acuerdo de colaboración para implantar un centro de alta formación y especialización para profesionales de la cocina.

El objetivo marcado es que desde 2017, desde el nuevo centro se impartiesen dos másteres, dos cursos especializados más un conjunto de jornadas y seminarios para los profesionales. La previsión era que las clases se desarrollasen en la Térmica y en la Escuela de Hostelería de Benahavís. Sin embargo, los buenos propósitos reflejados en el convenio nunca llegaron a materializarse.

Noticias relacionadas