Desbrazado el cauce y eliminadas las grandes cantidades de material arrojado a su interior, la Junta de Andalucía sigue moviendo piezas en el proyecto de transformación de la parte alta del río Guadalmedina en un parque fluvial y de uso ciudadano.
El último paso del Gobierno andaluz, por medio de la empresa pública Tragsa, consiste en la compra de 40.500 toneladas de zahorra reciclada necesarias para la configuración de los senderos peatonales en el marco del propio río y en el entorno forestal.
Una cantidad de material más que considerable que da buena muestra de la envergadura de la actuación pretendida, en la que, según datos del Gobierno andaluz, se van a invertir del orden de 7,5 millones de euros.
Conforme a los datos recogidos en la licitación de este suministro, la inversión relativa a la zahorra roza los 348.000 euros (IVA incluido). Las empresas interesadas en optar al contrato tienen hasta el 26 de mayo próximo para presentar sus ofertas.
Mapa con la red de caminos proyectada en la zona de los Montes.
Una de las particularidades fijadas en el pliego de condiciones que rige el procedimiento, es que la firma o firmas adjudicatarias (hay tres lotes), estarán obligadas a suministrar cada día 250 toneladas de este material. Asimismo, tendrá que suministrarlo en el entorno del río Guadalmedina a pie de obra.
Los documentos recogidos en la licitación incluyen un mapa sobre las actuaciones a desarrollar con esta zahorra. Además de la parte correspondiente al encauzamiento urbano, donde se pretenden generar itinerarios de paseo, entre otros, destaca la gran malla de caminos contemplada en la parte forestal.
En total, según el mapa, 39 en los terrenos localizados al oeste de la presa de El Limonero. La superficie de los mismos, atendiendo a los datos recogidos, se acerca a los 30 kilómetros lineales.
La propuesta autonómica para mejorar las actuales condiciones del Guadalmedina afecta exclusivamente a la parte que se extiende entre el puente de Armiñán y El Limonero, con unos 5,1 kilómetros.
De los 7,5 millones programados, la mayor parte, con unos 5 millones, se destinan a la reforestación prevista en los Montes, con una dimensión semejante a 350 campos de fútbol, con 105.000 árboles. Pero el gran protagonista, al menos en lo que a los vecinos de la zona se refiere, es el paseo fluvial, donde se plantarán 5.200 plantas autóctonas.