La apuesta de Málaga por transformar la movilidad en el eje litoral y el entorno del Centro histórico sigue superando hitos. El último de ellos queda materializado con la finalización del anteproyecto del intercambiador de autobuses dibujado bajo la Plaza de la Marina, una gran estación soterrada cuya ejecución supondría una inversión de 76 millones de euros.
De ellos, 17,9 millones se vinculan a las estructuras; 11,5 millones a las instalaciones, y 8,6 millones a la arquitectura. El edificio, con tres niveles bajo tierra, tendría capacidad para 29 dársenas de autobuses. De ellas, 12 en el nivel -1 y las 17 restantes en el -2.
Así queda recogido en el documento elaborado por las empresas Wsp Spain-Aìa y Estudio 7 Soluciones Integrales, en el que se señala que el tiempo necesario para su construcción sería de unos 36 meses. Es decir, de tres años.
El trabajo técnico, que ha podido ser consultado por EL ESPAÑOL de Málaga, recoge un hipotético plan de obras para desarrollar una de las piezas principales del Plan Málaga Litoral, que también incorpora otra estación bajo la Explanada de la Estación, el soterramiento del tráfico en Muelle Heredia, Paseo de los Curas y parte del Paseo Pablo Ruiz Picasso, y una ambiciosa operación de peatonalización en superficie.
Tomando en consideración de los detalles incluidos en el estudio de coste-beneficio elaborado, la previsión es que el proyecto de ejecución de la estación sea licitado y redactado entre los años 2023 y 2025, fijándose el inicio de las obras en 2026 y su culminación en 2029. Para la puesta en servicio del intercambiador de La Marina se fija el año 2030.
Gran ahorro económico
De acuerdo con las conclusiones de este estudio de coste-beneficio, la recomendación es claramente favorable a la ejecución de la estación. Sirva como ejemplo que uno de los análisis señala que en el supuesto de que la subestación de autobuses de Muelle Heredia fuese desmantelada en 2028 y se generase una demanda inducida por el nuevo intercambiador, entre los años 2027 y 2059 se lograría una demanda acumulada de 118 millones de viajeros; se ahorrarían 19,6 millones de horas en traslados, con una repercusión de casi 370 millones de euros ahorrados.
Otro apunte interesante que se hace en el anteproyecto es que la estación planteada no supondría obstáculo alguno para una futurible ampliación de la línea del Metro, que actualmente se plantea hasta la mitad de la Alameda Principal, hacia la zona Este.
De hecho, se indica que si la Junta de Andalucía avanzase en esa operación, la intermodalidad entre la estación y el suburbano se produciría de manera directa. Algo parecido se señala en cuanto a la posible extensión del recorrido del tren de Cercanías hacia el Centro.