Los nueve menores detenidos como miembros de un grupo que supuestamente se dedicaba a extorsionar, amenazar y agredir a otros menores en Málaga capital han quedado en libertad, aunque siguen investigados en unas diligencias abiertas por la Fiscalía de Menores.
Así lo han confirmado a Europa Press fuentes fiscales, quienes han apuntado que se les venía investigando por parte de la Policía por acoso desde hacía algún tiempo.
Según la información adelantada por Málaga Hoy y ABC, se está estudiando tanto las cámaras de seguridad de la zona como los móviles de los menores; a lo que este último rotativo añade que además se han rastreado sus perfiles de redes sociales.
Agentes de la Policía Local detuvieron a nueve menores como presuntos integrantes de una banda que se dedicaba a extorsionar, amenazar y agredir a otros menores en la ciudad de Málaga.
Según informó el Consistorio, los hechos tuvieron lugar sobre las 20,00 horas de este pasado viernes, 4 de noviembre, en la zona Este de la ciudad. La Sala 092 de la Policía Local de Málaga recibió varias llamadas en las que se alertaba de una reyerta en la que participaban un número considerable de jóvenes, algunos de ellos armados con palos, navajas y puños americanos.
Hasta el lugar se personaron varias unidades de policías locales de la Jefatura del Distrito Málaga Este y un equipo del Grupo Operativo de Apoyo (GOA), quienes observaron en calle Quitapenas a un grupo de jóvenes corriendo hacia calle Biznaga. Tras ser interceptados, se comprobó que todos ellos, un total de nueve, eran menores con edades comprendidas entre los 14 y los 17 años.
Así, presuntamente, los menores podrían estar implicados en varios hechos delictivos hacia otros menores, tales como amenazas graves, extorsiones o robos con violencia, entre otros. Ante los hechos denunciados por varias víctimas, los menores fueron detenidos y trasladados a dependencias de Policía Nacional, quienes continuarán con las investigaciones.
Asimismo, tras proceder a su detención, los policías locales procedieron a intervenir los nueve teléfonos móviles que portaban y que fueron entregados en las citadas dependencias policiales para su posterior estudio. Además, los agentes intervinieron tres palos de grandes dimensiones que podrían haber portado durante la trifulca.