La vieja e histórica Tabacalera de Málaga ya tiene quien le arregle las numerosas arrugas que le han ido saliendo con el paso de los años. Casi seis meses después de que el Ayuntamiento activase el concurso para contratar los trabajos de reparación de las patologías detectadas en los edificios que componen el complejo, ya hay empresa adjudicataria. Y la tarea ha sido encomendada a la firma Gámez Pinazo.
De acuerdo con los detalles de la resolución de la Gerencia de Urbanismo, la inversión de las actuaciones planteadas roza los 320.000 euros (IVA incluido), siendo el plazo de ejecución de las obras de 6 meses.
Entre las labores conservación y mantenimiento que ha de desarrollar la adjudicataria destaca el arreglo de las fisuras existentes en los pináculos ornamentales de cubierta, habiéndose producido desprendimientos puntuales en algunos de éstos; así como de las piezas de ladrillos y albardillas sueltas o mal adheridas en antepechos de petos de cubierta.
El análisis realizado por los técnicos de Urbanismo confirman, además, que hay fisuras y desprendimientos en el hormigón de recubrimiento de las cornisas de algunos edificios; fisuras en muros de fábrica, balaustradas y piezas ornamentales cerámicas en edificios E-0 y E-1 anexos a la entrada principal del complejo; problemas de estanquidad en las cubiertas de los edificios E-2 y E-4 del complejo, así como en las pasarelas que conectan el edificio E-2 con los edificios E-3 y E-4, y problemas de corrosión de armaduras en los elementos estructurales de hormigón armado de las plantas sótanos de los módulos M-1 y M-2.
El conjunto de Tabacalera, recuperado por el Ayuntamiento tras firmar un convenio urbanístico con la antigua Altadis, está compuesto por once pabellones independientes ordenados en torno a un espacio central.
Una organización que respondía al proceso de fabricación del tabaco. Seis de estos pabellones conforman una ordenación simétrica en torno a un espacio interior, localizándose los otros cinco, dedicados a almacenaje, en el borde sur de la parcela.