Como ocurre con la Torre del Puerto de Málaga, el debate electoral ya activado, que culminará el 28 de mayo con la llamada a las urnas de los vecinos de la capital de la Costa del Sol, se antoja decisivo para ver qué ocurrirá finalmente con los antiguos suelos de Repsol.
Mientras el PSOE y Con Málaga, coalición integrada por Podemos e Izquierda Unida, abogan claramente por dejar expedita la parcela y reservarla en su integridad para un gran parque, el Partido Popular mantiene su idea de que es un espacio estratégico para desarrollar una nueva centralidad urbana con cuatro torres de uso residencial y oficinas.
En su caso, Ciudadanos ha venido defendiendo la posibilidad de que el Consistorio renunciase a sus aprovechamientos en favor de ampliar la zona verde, algo que ahora se ve seriamente comprometido por la subasta ya impulsada y que está a punto de quedar formalizada. Esta es la línea de acción de que se defiende, aunque se asume la complejidad jurídica.
Este domingo el candidato socialista a la Alcaldía de Málaga, Daniel Pérez, ha querido mostrar su apuesta por que estos 177.000 metros cuadrados acojan, en la línea de lo pretendido por el colectivo Bosque Urbano, una especie de Central Park para la capital de la Costa del Sol.
Con el objetivo de dar a conocer su planteamiento, Pérez, acompañado de otros miembros de su candidatura a las elecciones municipales del 28 de mayo, ha acudido a la parcela para plantar árboles.
"Estamos en contra de la construcción de torres de 30 plantas en esta parcela. Estamos en contra al igual que la inmensa mayoría de los malagueños. Nuestro compromiso es claro: hacer un gran parque, a modo de Central Park, en los terrenos de Repsol para que la totalidad de los 177.000 metros cuadrados de la parcela sea zona verde", ha explicado.
Una promesa en la que coincide plenamente con la coalición Con Málaga, integrada por Podemos e Izquierda Unida, pero que se topa de lleno con el hecho de que está próxima a ultimarse la adjudicación en favor de la promotora Urbania de la venta de los aprovechamientos que el Ayuntamiento tiene en estos terrenos y que dan derecho a la construcción de tres grandes torres.
A cambio, la compañía privada, que ha hecho una apuesta más que considerable por grandes equipos de arquitectura para estos inmuebles, pagará a la ciudad algo más de 66,4 millones de euros.
En las explicaciones contenidas en la nota de prensa remitida por el PSOE no se aclara qué hará Pérez en el supuesto de alcanzar la Alcaldía con esta enajenación ni si, para evitar cualquier construcción sobre la misma, tratará de negociar con los privados una posible compensación. Hay que recordar que además de los aprovechamientos municipales, la Sareb, el bautizado como banco malo tiene en sus manos suelo para otra torre.
Pérez ha recordado que Carretera de Cádiz y Cruz de Humilladero son los dos distritos más densamente poblados de Europa. "Málaga necesita un gran pulmón verde en estos distritos; esta zona demanda un espacio para el esparcimiento, no más masificación", ha insistido.
Se ha comprometido, además, a poner en marcha un plan de arborización de la ciudad. "Nuestro compromiso es plantar un árbol cada día", ha dicho, al tiempo que ha apostado porque toda la ciudadanía malagueña cuente con un parque a menos de 300 metros.
Asimismo, ha exigido a la Junta de Andalucía que cumpla su compromiso de hacer un gran parque en Arraijanal, un parque metropolitano que ha "guardado en un cajón". "Que haya un gran parque en el entorno de Arraijanal es necesario", ha añadido.
Los socialistas llevan otras propuestas en su programa para hacer de Málaga una ciudad verde. Medidas como el desarrollo de un cinturón verde, la creación de un plan de huertos urbanos y de jardines verticales o la mejora del Campamento Benítez.