El primer coliving destinado a trabajadores del Parque Tecnológico de Andalucía (PTA) en Málaga arranca su particular cuenta atrás. Pese a que fue anunciado en octubre de 2021, no va a ser hasta ahora cuando se inicie la construcción del complejo residencial, con capacidad para 105 alojamientos no permanentes y no turísticos, a lo que sumar piscina y 56 plazas de aparcamiento.
El paso adelante por parte de la impulsora de la iniciativa, la promotora Grupo Lar, se produce después de haber alcanzado un acuerdo de asociación con Arcano, que gestiona el Fondo Impacto Andalucía, para levantar este residencial del tipo coliving o de espacios flexibles, tal y como informó días atrás Cinco Días.
Fuentes cercanas al proyecto han confirmado a EL ESPAÑOL de Málaga este mismo miércoles está previsto que comiencen los primeros trabajos sobre la parcela de la tecnópolis donde se levantará este alojamiento, cuyo diseño lleva la firma del estudio HCP. A partir de ahí, según el calendario, algo menos de dos años, lo que hace factible pensar en que habrá que esperar a mediados de 2025 para que esté completado.
Muestra del peso de la operación es que va a suponer una inversión en ejecución material superior a los 13 millones. Están son, a día de hoy, las primeras viviendas destinadas a los operarios del PTA, ahora bautizado como Málaga TechPark. Un espacio empresarial que tras 30 años de vida se ha convertido en epicentro de la actividad empresarial de la provincia de Málaga.
Atendiendo a los datos proporcionados por el propio parque, son 653 las empresas asentadas en la tecnópolis. Las mismas generan más de 24.000 trabajadores y tienen una facturación anual de 2.700 millones de euros.
De acuerdo con los detalles originales del proyecto, la edificación tendrá 5 plantas destinadas a apartotel residencial de alojamientos temporales no permanentes no turísticos. Una de las particularidades de esta iniciativa es que los inquilinos dispondrán de servicios añadidos como bar-cafetería, lavandería, salones comunes, sala polivalente, gimnasio, espacio de trabajo, sala social-cine, salón de eventos y bar de eventos.
Inicialmente, la actuación se dividía en dos fases. La primera de ellas incluía la edificación y la urbanización, con un presupuesto de ejecución material de casi 10,4 millones de euros. La segunda fase incorporaba la piscina exterior (licencia independiente).
El conjunto del proyecto está formado por una única edificación en cuya volumetría se identifican tres brazos (bloque 1, bloque 2 y bloque 3) que se encuentran conectados en uno de sus extremos. Los brazos laterales tienen cuatro niveles y el brazo central cinco.