El anhelado proyecto de regeneración de los Baños del Carmen, uno de los emplazamientos icónicos de la capital de la Costa del Sol, sigue anclado en un escenario de espera que se viene alargando desde hace décadas.
Ni siquiera el compromiso de las Administraciones públicas por allanar la recuperación del asentamiento, dando forma a un parque terrestre de uso ciudadano y ejecutando las necesarias infraestructuras marinas para proteger el espacio de los temporales y crear una playa de hasta 37 metros, ha permitido desbloquear el camino.
Tanto es así que fuentes cercanas a la operación confirman a EL ESPAÑOL de Málaga que la Dirección General de Costas sigue a la espera de que el Ayuntamiento de Málaga remita el proyecto final de construcción del parque terrestre recogiendo las correcciones "menores" que fueron reclamadas por el organismo estatal.
Se da la circunstancia de que pasan ya cerca de seis meses desde que se realizaron las mencionadas subsanaciones. "Siguen esperando la última versión con los cambios, que son muy menores", remarcan las fuentes consultadas.
A la recuperación de la parte de tierra de los Baños del Carmen se debe sumar la construcción de la obra marítima, que ya ha superado el trámite ambiental, lo que supone un avance más que significativo. De hecho, pasa ya casi un año de ese hito sin que hasta el momento el Ministerio de Transición Ecológica haya activado la licitación la contratación la obra, que necesitará de una inversión de unos 4 millones de euros.
De la actuación, destaca la apuesta por la construcción de un espigón de 193 metros de longitud al poniente de la playa; la recarga de arena en la playa a poniente de los Baños del Carmen con una aportación de 73.837,50 metros cúbicos de arena, sin afectar o tocar la denominada zona de roquedal que rodea la explanada donde se ubica el edificio. Esta acción permitirá disponer de un ancho medio de 37 metros, 27 metros más que la anchura de playa actual.
Precisamente, el aporte de esta arena está generando ciertas dificultades a Costas, ya que el documento ambiental le ha obligado a concretar en qué puntos se va a extraer la arena que posteriormente va a ser distribuida en la playa de los Baños del Carmen. Eso ha motivado la activación de una especie de asistencia técnica, que se va a encargar de realizar analíticas de las posibles áreas.
En este escenario, en el seno del Gobierno se maneja la idea de que a lo largo de este año se pueda poner en marcha el procedimiento de adjudicación de los trabajos de la parte marítima. Desde el momento en que tenga lugar la contratación, habrá que estimar un año de obras.
Cuando quede allanado el camino para el inicio de las obras sobre el terreno, la incidencia será especialmente clara sobre el restaurante de los Baños del Carmen. De hecho, las fuentes apuntan que las obras obligarán a mantener cerrado durante unos ocho meses el negocio hostelero.
Hay que recordar que el mismo cuenta con autorizaciones en precario y de carácter temporal por parte de la Junta de Andalucía. En este contexto, se abre la puerta a que desde la Administración regional se pudiera activar un concurso público para otorgar una concesión definitiva.