Si es vecino de Málaga capital, esté atento a su próxima factura del agua. Porque verá como ha subido el precio final que paga. Y ello porque ya son efectivas las nuevas tarifas acordadas por el Ayuntamiento para el servicio de abastecimiento. El paso se produce después de que el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía haya publicado este jueves la resolución de la Dirección General de Tributos de la Consejería de Economía de la Junta de Andalucía autorizando los nuevos valores.
La resolución tiene fecha de 19 de junio de 2024, surtiendo efectos desde ese día aunque en la ordenanza municipal se contempla que la entrada en vigor se produciría cinco días naturales después (24 de junio). Dado que los precios de saneamiento y depuración están vigentes desde el 26 de mayo, se completa así la tramitación de la modificación de las tarifas tras ocho años de congelación.
Además del equilibrio financiero de la sociedad dependiente del Área de Sostenibilidad Medioambiental, los nuevos ingresos permitirán asumir más servicios de saneamiento, con un coste anual de 7,29 millones, y la puesta en marcha de un plan de inversiones de 100,3 millones para la ejecución de más de 130 obras previstas entre 2024 y 2029.
La propuesta de precios contempla una implementación progresiva de estos durante los próximos ejercicios, con un horizonte de cinco años. Así, la empresa municipal calcula que el primer año con todas las tarifas en vigor (abastecimiento, saneamiento y depuración) el incremento medio en los hogares será del 32,8% frente al 42,5% previsto inicialmente, pasando de 14,59 a 19,38 euros al mes (sin IVA y sin el canon de la Junta de Andalucía), lo que supone 4,79 euros más al mes o unos 15 céntimos más al día. En el segundo año de aplicación (mediados de 2025) se subiría en unos 0,36 euros más al mes; otros 0,36 en 2026; 0,48 adicionales en 2027 y otros 0,48 en 2028.
Cuando se complete esta modificación en su quinto año de aplicación, cada vivienda acabará pagando, de media, en torno a 6,47 euros más al mes respecto a lo que abona actualmente (unos 20 céntimos más al día). Es decir, cada hogar pasará de abonar 14,59 euros a 19,38 euros al mes de media en 2024 y 21,05 euros en 2028, lo que supondrá un promedio al final del quinto año del 44,3% más en lugar del 47,7% estimado en los primeros estudios.
En cuanto al resto de clientes, las comunidades de propietarios sin contadores individuales pagarán una media de 105 euros más por comunidad al mes el primer año, de 286,61 a 392,21 euros (36,8%), llegando a los 431,68 en 2028. Por su parte, los suministros empresariales y comerciales abonarán de media 14,28 euros más al mes el primer año, de 41,02 a 55,3 (34,8%), y 19,6 cuando se complete el ciclo (un total de 60,64 al mes), mientras los suministros oficiales pagarán 76,77 euros más al mes, de 214,39 a 291,16 (35,8%), llegando a los 320,7 en 2028.
Otra de las novedades que recogen las nuevas tarifas es la eliminación del recargo especial de impulsión, que actualmente afecta a unos 51.000 abonados y que aporta unos ingresos anuales cercanos al millón de euros. Además, el concepto de desalación que se factura a todos los clientes quedará integrado en la tarifa de abastecimiento, por lo que el efecto resultará neutro para el usuario, que sólo percibirá la simplificación en la factura bimestral. En cuanto a las de saneamiento y depuración, se incluyen sendas disposiciones transitorias para que su aplicación sea escalonada hasta alcanzar el 100% en el quinto año.