La zona azul sigue dando lucrativas alegrías a Smassa, que ya trabaja en extenderla por toda Málaga

Como el oro, la política de aparcamientos se ha convertido en una especie de valor seguro para el Ayuntamiento de Málaga y sus, hasta ahora, socias en la Sociedad Municipal de Aparcamientos (Smassa), Unicaja y Empark. Trimestre tras trimestre, salvo el periodo marcado a fuego por la Covid, los resultados económicos de la entidad son positivos, arrojando beneficios millonarios.

Una dinámica favorable que se deja ver a las claras en la primera mitad de 2024. Los datos oficiales recogidos por la entidad mixta arrojan unos ingresos vinculados a la explotación de los parking, la grúa y la zona azul más que considerables: casi 9,8 millones de euros. La cuantía supone un crecimiento cercano a los 1,8 millones respecto al mismo periodo de 2023. Y, de hecho, es la cifra más elevada desde 2015, superando los 9,13 millones de euros de mediados de 2018.

Y pese a ello, el resultado final del primer semestre está por debajo de lo ocurrido un año atrás. En concreto, de 1.051.180,54 euros, 707.551,11 menos que el ejercicio previo. ¿Por qué? Porque en la misma medida en que han subido los ingresos, se han incrementado de manera sustancial los gastos relacionados con Personal, con 931.657,34 euros más, y los gastos financieros, que se han disparado un 165,76% "como consecuencia de la imputación de los costes financieros por el aumento de los tipos de referencia, la póliza de crédito, por el aplazamiento de deuda por venta de plazas de aparcamientos para residentes".

De manera precisa, en términos absolutos la principal fuente de ingresos de Smassa siguen siendo los aparcamientos en rotación existentes en la ciudad, con una aportación de 6.934.333,81 euros (1.378.570,46 más), seguida de la venta de plazas de aparcamientos, con 3.468.263,11 euros. Esto supone un incremento de 3,4 millones respecto a los seis primeros meses de 2023. No obstante, ello es debido a la enajenación de las plazas del polémico parking Pío Baroja, en la zona Este de la ciudad.

Aunque en unos términos monetarios algo inferiores, la conocida como zona azul o SARE sigue dando muchas alegrías a los socios público y privados de Smassa. Sólo en el periodo de enero a junio, la gestión de estos estacionamientos en superficie, cuya mancha se sigue extendiendo por los barrios de la capital, reportó 1.642.394,38 euros, casi 389.000 euros más. 

En términos porcentuales es esta parte de la labor de la sociedad de aparcamientos la que más crece de un año a otro, con un 31%. De hecho, nunca antes este servicio ha sido tan rentable para Smassa como ahora. La cifra lograda en la primera mitad de este año es la más elevada de toda la historia de la entidad, superando los 1,5 millones del año pasado o los 1.471.399 de 2022. 

El Servicio de Apoyo a la Circulación (S. A. C.) se mantiene en valores muy semejantes a los del año pasado, con unos ingresos de 912.859,84 euros. Es llamativo el aporte de la grúa en estos primeros seis meses si se tiene en cuenta que se ha producido un desplome más que significativo en el número de operaciones. Si entre enero y junio de 2023 los empleados realizaron 12.369 intervenciones, en el mismo periodo de 2024 la cifra ha caído un 20,37%, hasta las 9.849.

Los que sí crecen son los de usuarios de los aparcamientos en rotación, que pasan de 1.328.908 en 2023 a 1.402.332 en el primer semestre de 2024, y el SARE, que fue utilizada entre enero y junio de este año por 1.613.405 usuarios (3% más).