Elisa Pérez de Siles es, formalmente, la número 2 de Francisco de la Torre. Y pese a ello cierra al instante cualquier debate sobre su posible alternativa para suceder al veterano regidor. Aunque transcurren ya más de 24 años desde que De la Torre llegó a la Alcaldía, nadie se atreve a ponerle fecha de caducidad. Ni él ni el Partido Popular. Y, salvo giro radical en los menos de tres años que restan de mandato, su rostro será, de nuevo, el que aparezca en los carteles electorales de 2027.
La última entrevista que le hice fue a finales del 2022. De ese día a esta parte han pasado muchas cosas. Entre otras que usted es primera teniente de alcalde del Ayuntamiento de Málaga. ¿Cómo lleva ser la mano derecha del alcalde?
Todas las funciones que se me asignan las asumo con responsabilidad. Y esta con mucha responsabilidad. No me siento ni más ni menos importante dentro del equipo por ser la número 2 o la número 13. Es cierto que se me han encomendado otras funciones que tienen que ver con la Portavocía. Tener la voz de muchos proyectos en los que trabajan mis compañeros y tener que venderlos, implica una mayor responsabilidad. Pero así es como asumo las funciones de Portavocía o la coordinación del Grupo Popular. Muchas veces digo que no sé si estoy a la altura de los proyectos que trabajan mis compañeros.
Lo que sí parece claro es que tienen menos dolores de cabeza que el mandato pasado. La desaparición de Ciudadanos ayuda a ello…
Facilita, sin duda. Porque, sobre todo en los dos últimos años, nos tenían un poco desconcertados. Los dos primeros años nos sentíamos muy cómodos porque teníamos una hoja de ruta clara. Pero en la parte final del mandato empezaron a cambiar con respecto al documento que habían suscrito. Era como el Guadiana. Se levantaban con una idea, al otro día tenían otra#, pero no estamos más cómodos por el hecho de tener la mayoría absoluta. Porque el alcalde nos dio la encomienda, y nos recuerda en cada Junta de Gobierno, que nos debemos a los vecinos, a los que nos votaron y a los que no, que los fines de semana se trabaja y que hay que descansar moderadamente…
Pese a tener mayoría absoluta tendemos la mano en muchos proyectos, porque es nuestra forma de trabajar, aunque no tenemos mucha suerte. Con la incorporación de un nuevo grupo político (en alusión a Vox), ahora tenemos ultraderecha y ultraizquierda. Pero es curioso que en el Ayuntamiento hacen pinza y llegan a muchísimos acuerdos. Aquí todo vale para atizar al equipo de gobierno y a Paco de la Torre.
Tras los resultados de las elecciones municipales de 2023, la figura de Paco de la Torre parece incontestable. ¿Existe algún debate en el seno del PP sobre el futuro?
Qué duda puede haber cuando un responsable político se presenta a unas elecciones después de 24 años de gobierno y vuelve a conseguir el respaldo mayoritario de la ciudadanía. Hemos ganado en todos los distritos y en algunos con más del 50% de los vecinos. Hay compañeros que destacan la admiración personal que tengo al alcalde. Y es verdad. Llevo 18 años trabajando en el equipo de Paco de la Torre y conozco la sensibilidad social que tiene con la gente. No se trata de una posición impostada. Es así. Se preocupa y se ocupa de la gente.
Es admirable una persona que después de tantos años en la función pública mantiene su ilusión tan intacta y que perfectamente hubiera cumplido con su hoja de servicio hace años. Si se hubiese retirado ya sería una persona admirada en la ciudad por toda la transformación que ha conseguido. Aunque es verdad que es un éxito de todos, es fruto de una planificación y de una estrategia de ciudad muy personales, que han tenido como capitán a Paco de la Torre. Después de tantos años viene cada día al Ayuntamiento con su ilusión renovada. Es incuestionable su liderazgo.
"Es admirable una persona que después de tantos años en la función pública mantiene su ilusión intacta; si se hubiese retirado ya sería una persona admirada en la ciudad por toda la transformación que ha conseguido"
Mientras Paco de la Torre quiera, se va a presentar.
Obvio. Mientras Paco de la Torre tenga la vitalidad y la ilusión que tiene… Ahora sigue planificando para los próximos 15 o 20 años. Y mientras siga percibiendo el cariño de la gente. Es muy difícil que después de tantos años, cuando tomas decisiones que gustan a unos y disgusta a otros… Es un cariño muy sincero. Ves que la gente se acerca con ese cariño, que cuando pasamos por los recorridos procesionales levanta un aplauso natural y espontáneo. Mientras que Paco de la Torre tenga eso y mantenga eso, ¿para qué plantear otro escenario?
Por lo que entiendo de sus palabras, en el seno del Partido Popular no existe debate alguno…
Es que ese debate ahora mismo es extemporáneo. Sería ilógico plantear ese debate cuando el alcalde se presentó y además lo hizo de forma muy sincera y muy honesta, asegurando que iba a estar los cuatro años. Eso el partido lo tiene claro. ¿Qué va a pasar después? Él no ha planteado un compromiso expreso, pero le doy mi opinión personal: mientras que el alcalde mantenga esa vitalidad, estoy convencida de que se va a volver a presentar.
No es de las personas que se sientan a ver qué pasa. Ahora mismo la ciudad tiene muchos retos por delante y estoy convencida de que mientras Paco de la Torre tenga la ilusión para abordarlos va a volver a presentarse. Eso no quita que dentro del partido haya opciones, personas con trayectoria y experiencia y que en un futuro podrían asumir ese liderazgo. Pero siempre digo que esa persona tendrá que asumir una sombra muy larga, que es la sombra de Paco de la Torre. Eso será muy difícil, porque la figura de Paco de la Torre es irrepetible, no sólo en Málaga, sino en cualquier municipio de nuestro país.
Ahora toca que le pregunte si usted se ve dentro de esa lista de futuribles en caso de que llegase.
A mí es que me ponen ustedes. Ustedes me han metido en el debate…Y siempre digo lo mismo.
Objetivamente, es usted la sucesora natural del alcalde en este momento.
Bueno, en este momento, claro. Pero yo asumí esta responsabilidad con ese espíritu de suplencia; nunca con el espíritu de sucesión. Por tanto, son ustedes más bien los que plantean ese debate que, insisto, es extemporáneo.
¿No le gusta que le coloquemos en esa situación?
No me gusta porque estoy permanentemente en ese debate. Y al final es un debate público que está al margen de la realidad y a veces me molesta. Siempre digo que la más bonita vocación de servicio público es la municipal. Porque es la responsabilidad que te permite ver casi de inmediato el resultado de las acciones que se hacen. Creo que la política más bonita es la municipal.
Dentro de de una persona con vocación de servicio público que se dedica a la política municipal, yo creo que no puede haber nada más bonito que ser alcalde de tu pueblo o de tu ciudad. Creo que no puede haber aspiración más bonita en el mundo. Pero insisto en que a mí nunca se me ha puesto en ese escenario ni se me ha pedido que asuma esa responsabilidad con aspiración de sucesión.
"No puede haber aspiración más bonita que ser alcalde de tu pueblo o de tu ciudad; pero nunca se me ha puesto en ese escenario ni se me ha pedido que asuma esa responsabilidad con aspiración de sucesión"
¿La política le sigue llenando?
Por supuesto. Cada día, cada día, si no sería imposible echarle tantas horas. Esto no tiene horario, de lunes a domingo; mañana, tarde y noche. Estoy desempeñando funciones en la ciudad más bonita del mundo. No puede haber nada más emocionante ni nada más ilusionante.
En alguna ocasión me dijo que aspiraba a trabajar para aquello para lo que había estudiado: Derecho.
Efectivamente. Tengo claro que a los sitios hay que saber llegar y hay que saber irse. Y cuando la ilusión decaiga o cuando entienda que no puedo aportar más, me iré. Y lo haré al ejercicio de mi profesión. Volveré a meterle mano a todo lo que haga falta, porque a mí no se me caen los anillos. Estudié Derecho por vocación. Afortunadamente tengo una profesión a la que volver. Creo que eso es importante.
Lo que no tiene claro es cuándo va a llegar ese día.
No, no lo tengo en mente. Cuando eso ocurra me iré y seguiré colaborando con mi partido, porque me siento muy identificada con sus siglas y con lo que representa, con sus fuertes convicciones de Estado.
¿Usted es de las que cree firmemente en la idea del agravio que en los últimos tiempos se viene implantando? Digo el agravio respecto a lo que ocurre en otros territorios, al trato del Gobierno central.
Es obvio el agravio que estamos sufriendo en estos últimos tiempos. Hablo de los problemas diarios que hay con los trenes de Cercanías o con los AVE. Es tanta la incertidumbre que muchas veces optamos por el avión. Hablamos de las infraestructuras del agua. Vemos cómo se está n regando con millones a otras comunidades autónomas y no a la nuestra. Hay muchísimos ejemplos. Cualquier vecino ya percibe ese castigo. Málaga es de las provincias que más aporta vía impuestos. No estamos diciendo que nos den nada más que lo que nos corresponde. Me parece muy bien que le vaya bien a Cataluña, pero no se puede hablar de singularidad.
Hablaba antes de los proyectos que está afrontando Málaga en la actualidad. ¿No cree que se está intentando abarcar más de lo que se puede? La Rosaleda, unos 300 millones; el Plan Málaga Litoral, casi 500 millones; el Auditorio, más de 100.
Los proyectos que necesitan de una gran inversión no se ejecutan ni en un año ni en un mandato. Tienen que ir abordándose a lo largo de muchos años. ¿Qué es lo que se está haciendo ahora? Sentar las bases. Porque podemos tener en el horizonte los fondos europeos. Ahora estamos disfrutando de proyectos de hace 15 o 20 años. Y en aquel momento se decía que era una locura. Para eso están los sueños y si dejamos de soñar sería el momento de irnos. Málaga sigue pensando en grande porque somos una ciudad grande.
¿Es consciente del problema que hay en Málaga con la vivienda?
Es obvio que existe un desequilibrio entre la oferta y la demanda. Esto no es fruto de la casualidad y se venía viendo porque Málaga cada vez ha ido captando más la atención de personas que querían venir a vivir aquí, de personas que querían invertir aquí, de personas que querían venir aquí a trabajar.
"No me parece justo que se cuestione que el alcalde ha creado una ciudad para todos y que lleva años preocupándose de la calidad de vida de los malagueños"
¿Qué es lo que ha ocurrido? El Ayuntamiento lo venía viendo, pero ha trabajado en solitario, pese a no ser competente en la materia. Desde hace años hemos incorporado más de 5.300 viviendas públicas. La oposición hace muy poquito tiempo que se ha acordado de la vivienda. Quizás porque no lo está haciendo de una forma responsable, sino como un arma arrojadiza, un arma política. No está preocupada por la vivienda, porque si hubiese sido así, cuando ha tenido responsabilidades de gobierno, que ha sido durante 37 años en Andaluza, hubiera ejecutado sus competencias.
El Ayuntamiento sigue preocupado por la vivienda; es obvio que el mercado está tensionado porque, insisto, la oferta no ha crecido tan rápido como lo está haciendo la demanda. Y para responder a eso hay que incorporar vivienda. Estamos trabajando en varias líneas, como la del desarrollo del suelo, el planeamiento, invirtiendo, ofreciendo suelo público municipal de forma gratuita para que a la promoción privada le salgan los números para la construcción de VPO.
Desgraciadamente hemos estado muchos años trabajando solos. Y el Gobierno no para de anunciar cosas. Están muy bien los anuncios, pero estaría mejor si algo se convirtiese en realidad. Es el Ayuntamiento el que sigue haciendo el esfuerzo de inversión y lo vamos a seguir haciendo. Por eso no me parece justo que se cuestione que el alcalde ha creado una ciudad para todos y que lleva años preocupándose de la calidad de vida de los malagueños. Ahora se habla de los malagueños que se han ido fuera, pero son muchos más los malagueños que han llegado, que antes no tenían oportunidades y tuvieron que marcharse. Ahora sí hay oportunidades en Málaga.