¡Larga vida al quiosco! Al de toda la vida, dedicado a vender periódicos, revistas de todo tipo, coleccionables y chucherías, y a los de nuevo cuño, que aprovechando las libertades permitidas por el Ayuntamiento de Málaga empiezan a proliferar por toda la ciudad. La reinvención de estos negocios abre la puerta a su continuidad en un momento especialmente crítico, en el que, según todos los análisis, la defunción estaba próxima.
Ante el negro panorama, el área de Comercio puso en marcha años atrás la revisión de la ordenanza que regula el funcionamiento de los quioscos, ampliando de manera clara las posibilidades de explotación. Tras un largo y laborioso proceso de negociación y aprobación, el texto está en vigor desde principios de año, momentos desde el que son ya numerosos los proyectos presentados para acomodarse a las opciones de la ordenanza.
Así lo explica a EL ESPAÑOL de Málaga la concejala del ramo, Elisa Pérez de Siles, quien destaca que una de las salidas que más interés ha despertado entre los titulares de licencia es el de completar su oferta tradicional con lockers, o lo que es lo mismo, una estructura ajustada para que los clientes de, por ejemplo, Amazon, puedan recoger sus paquetes.
Una muestra del impacto positivo que está teniendo la ordenanza es que, según Pérez de Siles, son ya 48 los proyectos de paquetería aprobados, en muchos de los casos ya instalados y en funcionamiento. "Hay mucho interés", incide la edil. Aunque no tan numerosos como el formato de paquetería, antes incluso de la entrada en vigor de la norma ya se conocían iniciativas piloto para una panadería en Teatinos, heladerías en El Palo y cafeterías para llevar.
Incluso destaca que son varios los municipios que se han puesto en contacto con su departamento para conocer más detalles de la ordenanza, de la que dice es una de las "más innovadoras de toda España", al incorporar numerosas oportunidades de explotación comercial. Cabe recordar que el texto abre la puerta a convertir el quiosco en panaderías, cafeterías e, incluso, puntos de venta de entradas de teatro o de cine.
Soluciones con las que tratar de amortiguar los golpes que el sector viene sufriendo en la última década, lo que ha motivado la cancelación de hasta un centenar de instalaciones por parte del Consistorio.
En lo que de momento no hay un acuerdo cerrado con Akima, la Asociación de Quioscos y Vendedores de Prensa y Revistas de Málaga, es en el diseño definitivo de los nuevos módulos que se pueden llegar a implantar en la ciudad. "Estamos trabajando con ellos", explica Pérez de Siles, quien apunta que el modelo que se ha llegado a manejar tiene como rémora que es excesivamente abierto, lo que dificulta el mantenimiento y la seguridad por parte del quiosquero.
La puesta en marcha de la nueva ordenanza, según la edil, ha permitido reducir significativamente la sangría de cierre de estos negocios en la ciudad. De hecho, aprovechando las buenas perspectivas y el interés existente, el equipo de gobierno maneja la idea de, a finales de septiembre u octubre, impulsar un concurso para adjudicar 25 nuevas licencias de quioscos.
Nuevas instalaciones con las que contrarrestar las instalaciones caducadas en estos años por falta de actividad y responder a la petición de Akima permitir la implantación de negocios en algunas zonas de crecimiento residencial de la ciudad.