Mohamed Amra, nacido en la capital de Normandía, desde esta semana es la persona más buscada por las autoridades francesas. Es un criminal vinculado desde hace años al crimen organizado y fue liberado por un comando que portaba armas de gran calibre y asesinaron a dos agentes penitenciarios que se encargaban de su traslado desde un juzgado hasta la cárcel.
Amra es un narco de 30 años con un largo historial delictivo con 13 condenas a sus espaldas, una carrera criminal que comenzó desde muy joven con pequeños robos violentos. Hoy en día pesa sobre él una notificación roja de Interpol, aunque no sea un gran capo de la droga.
Su organización criminal emboscó al furgón que le transportaba desde el juzgado de Ruán, donde declaró por una causa pendiente de extorsión, hasta la prisión de Evraux donde debía permanecer por sus cuentas pendientes con la justicia. Entre otras, un secuestro cometido en el área de Marsella que acabó en asesinato. Un ajuste de cuentas entre bandas organizadas.
El lugar elegido para cometer el asesinato este pasado martes 14 de mayo fue muy estudiado por el comando. Se decidieron por un peaje de la autopista A-154 a la altura de Incarville, a mitad de camino entre las localidades francesas de Ruán y Evraux. Tras realizar el pago en las ventanillas del peaje, a mano derecha hay un área de descanso. Es la clave en este asalto, ya que en ese sitio un vehículo del clan esperó pacientemente a la llegada de Mohamed Amra.
Los hombres armados de Amra interceptaron los dos vehículos de instituciones penitenciarias que formaban el equipo de traslado justo en el momento en el que los agentes penitenciarios sobrepasaron la primera barrera del peaje. El coche que esperaba en el área de descanso circuló en dirección contraria para empotrarse contra la furgoneta donde trasladaban a Amra.
En el Peugeot sólo utilizaron a una persona, los demás miembros del comando estaban en otro vehículo que seguía al convoy penitenciario. Aparecieron detrás del segundo coche penitenciario, de ahí descendieron tres tipos que empuñaban fusiles de asalto AR-15 y Kalashnikov, y asesinaron a tiros a 2 agentes penitenciarios que se encargaban de la seguridad de Mohamed Amra. A los otros tres agentes encargados de esa misión también los hirieron de gravedad. El comando actuó con extrema violencia como se pudo ver en las imágenes que grabó una de las cámaras de seguridad del peaje. Los funcionarios franceses no tuvieron ninguna opción de repeler el ataque.
¿Cuántos 'Mosca' hay aquí?
En cuanto se supo el nombre del delincuente fugado apareció el nombre de Marbella, algo habitual en organizaciones criminales del nivel de tipos como Mohamed Amra. Narcodario y Le Parisien informaron que Mohamed Amra estaba relacionado con un tiroteo que ocurrió en Marbella.
La policía francesa y española tienen conocimiento de que Mohamed Amra ordenó un asesinato el 18 de julio de 2023 en Marbella, y la orden la dio desde prisión. Ese día dispararon contra un narcotraficante de Evraux que salvó la vida. El sicario empuñaba un subfusil y vestía una llamativa camiseta del Olympique de Lyon.
Intentaron ejecutarlo a plena luz del día en un establecimiento del centro comercial Cristamar de Puerto Banús. Aquello quedó registrado en un vídeo que apareció en todo internet. Un tiroteo grabado en Marbella, y en plena temporada alta es carne de viralidad. Esa acción hace una idea de qué organización maneja Mohamed Amra. Y es una a la que no le importan las consecuencias para su negocio.
La peligrosidad de organizaciones criminales francesas como la de Amra reside en que no miden sus actos, por eso provocan tiroteos a plena luz del día. Y hay decenas de clanes como el de Amra. Solo hay que tirar del hilo en Marsella, Nantes, París, Nimes o Avignon. Grupos criminales de todas estas ciudades operan en el sur de España porque desde aquí se abastecen de la mayoría de drogas que necesitan para su negocio. Son estos delincuentes los que muestran sin rubor alguno que llevan en una bandolera miles de euros en efectivo al entrar en una discoteca en Marbella y se pasean en Audis RS6. Es su estilo, algo que otras organizaciones criminales detestan porque llaman la atención de cualquiera.
La manera en la que trabajan es esta porque intentan paliar con extrema violencia su incapacidad para crecer en el negocio del narcotráfico. Los principales proveedores de drogas mundiales, como en cualquier empresa, no quieren clientes problemáticos. Hay más de 200 policías franceses buscando a Mohamed Amra y su organización ahora mismo está incapacitada para traficar porque se debe encargar de dar cobijo al narcotraficante más buscado en suelo francés.
Lo sucedido es una alerta para los traslados de este tipo de criminales. Por eso los sindicatos penitenciarios franceses protestaron después del día fatídico para que se ofreciesen más declaraciones judiciales por videoconferencias. Esto también es aplicable para España ya que criminales como Amra pululan por ciertas zonas, y aquí son igual de peligrosos que en Francia porque sus métodos los exportan.
En los transportes rápidos de drogas van bien pertrechados para repeler cualquier intento de robo. Esta semana hemos tenido un ejemplo de ello. Un narcotraficante sevillano fue tiroteado en una finca de Los Palacios en un intento de vuelco de droga, y sus compañeros dejaron su cuerpo en el hospital Viamed de Sevilla. Se sabe que venían de un intentar robar droga a otro clan porque todos vestían prendas de la Guardia Civil.
En la Costa del Sol será importante este verano la presencia de más patrullas zetas en lugares calientes para evitar la presencia de organizaciones criminales que no tienen reparo en mostrar su poder.