En el evento de Málaga AI celebrado en las instalaciones de Freepik la semana pasada pudimos comprobar el interés que sigue despertando la inteligencia artificial. Uno de los aspectos que comentábamos Demófilo Peláez, Diego Regules, Adrián Tineo y yo era lo difícil hoy en día que es organizar un evento en materia de inteligencia artificial dada la velocidad a la que evoluciona la tecnología, velocidad que puede hacer que el contenido de un evento programado con semanas de antelación quede obsoleto en sólo cuestión de días.
Dada esa frenética evolución, la necesidad de posicionarse bien a nivel global en el desarrollo de la tecnología así como la preservación de los derechos fundamentales, es por lo que se hace necesario a nivel estatal diseñar estrategias que permitan orientar y dirigir el desarrollo de la tecnología. En este sentido, el gobierno de España ha presentado hace unos días su Estrategia de Inteligencia Artificial 2024, destacando la importancia de esta tecnología como motor de transformación económica y social.
La estrategia se articula en torno a tres ejes principales:
Primero, fortalecer las infraestructuras tecnológicas clave, como la supercomputación y el desarrollo de modelos de lenguaje en castellano y lenguas cooficiales, especialmente a través del modelo ALIA.
Segundo, promover la adopción de la IA tanto en el sector público como en el privado, con un enfoque especial en las pymes y la innovación.
Tercero, establecer un marco regulatorio y ético robusto para asegurar el uso responsable de la IA, liderado por la nueva Agencia Española de Supervisión de la Inteligencia Artificial (AESIA).
Fija ocho palancas en las que centrar sus esfuerzos que pueden resumirse en: Impulsar la inversión y supercomputación, con una inversión prevista de hasta 100 millones de euros principalmente aumentando la capacidad del Supercomputador MareNostrum 5. Crear centros de procesamiento de datos sostenibles en beneficio del medio ambiente. Generar modelos y corpus que constituyan una infraestructura pública de modelos del lenguaje. Fomentar el talento en la IA con alrededor de 450 millones de euros de inversión. Impulsar la IA en el Sector Público. Expandir la IA en las PYMES y desarrollar un marco de ciberseguridad. De hecho, la Estrategia incluye la publicación de una Ley de Ciberseguridad para finales de 2024 así como desarrollar las funciones de la AESIA.
La estrategia subraya la necesidad de una colaboración público-privada y un consenso social amplio para aprovechar los beneficios de la IA mientras se mitigan sus riesgos. Enfatiza también la importancia de la ciberseguridad y la sostenibilidad en el desarrollo de infraestructuras de datos. Además, se busca fomentar el talento en IA mediante programas educativos y de capacitación.
El documento destaca que la IA no solo impulsa la productividad y el crecimiento económico, sino que también tiene el potencial de mejorar significativamente los servicios públicos y la calidad de vida de los ciudadanos. La AESIA desempeñará un papel central en supervisar y guiar el despliegue de la IA, asegurando que se respeten los derechos humanos y se promueva la inclusión social y económica.
En resumen, la Estrategia de Inteligencia Artificial 2024 de España es un plan integral que busca posicionar al país como líder en la adopción y desarrollo de tecnologías de IA, promoviendo un crecimiento económico inclusivo y sostenible.