"Detrás de cada puerta siempre hay una historia". Así de enigmática se muestra María Casado al hablar del nuevo proyecto asociado a Teatro Soho Televisión, la división audiovisual del espacio escénico creado por Antonio Banderas en Málaga, en su cuenta personal de Twitter. La periodista volverá a Televisión Española (TVE) para presentar un programa de entrevistas en profundidad producido TST.
La presidenta de la Academia de las Ciencias y las Artes de Televisión y del Audiovisual regresa a la que fue su casa siempre. Lo hace para conducir Las tres puertas donde charlará con importantes personalidades de la cultura, la política y la sociedad española en horario de máxima audiencia. Se trata de una de las apuestas y estrenos del nuevo año en La 1.
"La presentadora desvelará daos desconocidos de sus invitados con profundas entrevistas y reportajes", explica la televisión pública en su página web. El espacio será producido desde San Cugat y se emitirá en La 1 de TVE en horario de máxima audiencia.
Casado podría desempeñar en la cadena pública una tarea parecida a la que ya se le ha visto hacer en Escena en Blanco & Negro, el programa que ha presentado en Amazon Prime Video y que se centra en conversaciones con personajes relevantes del arte.
Pero, a diferencia de aquel formato, en el que prepara junto a TVE se ampliará el espectro de los entrevistados y el objetivo será "mostrar una misma realidad española desde dos puntos de vista claramente diferenciados, con algún reportaje añadido que dé contexto a esas entrevistas".
Casado iniciaba hace dos años una nueva andadura profesional tras su salida en RTVE donde había trabajado 21 años. La periodista aceptó un puesto como directora audiovisual de SohoTV, la productora que puso en pie Antonio Banderas en su teatro malagueño.
"Me abre la posibilidad de construir desde abajo lo que es una estructura de una productora, de crear los proyectos de montar los equipos, dado el caso dirigir, dado el caso, por qué no, presentar", contó a EL ESPAÑOL en 2020.
La catalana fue la encargada de darle al botón del encendido del alumbrado navideño en Málaga en noviembre del año pasado. "He soñado aquí en grande, he paseado a mi amor en la calle y me he comido mi espetito frente al mar. Para mí el café ya no es café, es nube. Vivo en pantalón corto once meses y medio al año", señaló entre risas aquel día.
"Me habéis contagiado una mijita de guasa... He dado las gracias a la Esperanza y al Cautivo. Aquí pienso quedarme para seguir soñando. No podría estar aquí sin mi malagueño saleroso y favorito Antonio Banderas: No me equivoqué", declaró en una calle Larios a rebosar de gente.