Propuestas para superar el día más triste del año

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Ideas para convertir el 'Blue Monday' en el día más feliz del año en Málaga

Este lunes se celebra la jornada internacional del 'todo mal', pero todo es cuestión de perspectiva. 

17 enero, 2022 05:00

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Se habla del Blue Monday como el día más triste del año. Aunque hay quien lo discute y cree que eso es sólo un bulo. Sea como fuere, este es el primer lunes de la definitiva vuelta a la rutina. No hay ni un solo festivo a la vista hasta el 28 de febrero, Día de Andalucía y ya han pasado los Reyes y el primer fin de semana de rebajas. Con chollazos o sin ellos, este es un día para, por lo menos, mirar taciturnos el calendario. ¡Ay!

Pero, oye, vivimos en Málaga, una provincia con demasiadas cosas buenas como para estar tristes. De hecho, muchos malagueños entristecen esta semana porque se van a Madrid a pasar frío en FITUR, pero luego allí se les pasa cuando ven que la Costa del Sol tiene atractivos de sobra para estar felices en todo momento.

Así que, queridos lectores, vamos a darle a la cabeza para llenar un día en el que ni siquiera un jefe malencarado podría arruinar la dicha de vivir en el paraíso terrenal.

Desayuno frente al mar

Está claro, esto se puede hacer en muchas ciudades, pero en ninguna como en Málaga. Ya puede llover, tronar o hacer un día maravilloso que este es un lujo asequible que tiene la facilidad de poner contento hasta al gato de Roberto Carlos (toma referencia viejuna).

Puestos a escoger, proponemos dos lugares en los que poder disfrutar de esos inicios del día: The famous La Galerna, en Pedregalejo. Desayunos con calma, de café en vaso grande y tostadas con aguacate todo el año. Claro, tener tiempo para poder estar una hora mirando al mar hace feliz a cualquiera...

Otra opción, también en Málaga Este (cuidado con los radares) es sentarse en la inmensa terraza del Balneario de los Baños del Carmen. Una vez cruzado el arco de ladrillo hay dos opciones: sentarse en la arena a mirar el infinito o desayunar en el restaurante. Cualquiera de las dos es buena idea para recordar que Málaga es la ciudad del paraíso.

Muelle Uno y el Palmeral

Es cierto que todos los planes para evitar un lunes triste requieren de tiempo, pero pasear es una actividad que se puede hacer en cualquier hueco libre. En el caso de la capital, es imposible olvidar uno de los espacios más intagrameables: el Muelle Uno y el Palmeral de las Sorpresas. La ele más concurrida por los influencers por las vistas únicas que deja.

Bien por la zona comercial o bien simplemente por la zona de paseo, ir por el puerto de Málaga es un lujo que cualquiera puede permitirse. Sentarse en la varanda transparente a ver cómo atardece con la Farola al fondo es digno de practicar. El dolce far niente malaguita.

Pasear por el Centro

Eso mismo se puede extrapolar al Centro Histórico de la capital. Sobre todo un lunes, en el que la afluencia de foráneos no es tan abundante como en fin de semana. No es que estorben, pero es más fácil ser feliz si puedes andar despistado por la calle.

Por eso, pasear por Málaga un lunes de enero no puede más que suponer una alegría. El entorno de la Catedral, el tiempo que parece detenido en calle Larios o, sencillamente, un paseo por el Parque ya cuentan con los ingredientes necesarios para ponerle un color más celeste al Blue Monday.

Ronda y Antequera

Casi siempre empezamos hablando de la capital, pero es indudable que no sólo somos playa. La Costa del Sol es top para hacer del día más triste del año una idílica jornada, pero es que el interior no se queda corto. Podemos hablar de Ronda y Antequera, pero también de Archidona, Frigiliana, Ojén, Casares o Genalguacil.

Por ejemplo, hablar del Tajo de Ronda debe ser repetitivo para los rondeños, pero para los que no tienen la suerte de vivir en el paraíso interior, ver el puente nuevo desde abajo es un paisaje único. 

Claro que en Antequera también hay cosas que hacer para evitar que este lunes sea el más triste. Es cuestión de gustos, claro, pero sentarse en un banco de la Iglesia del Carmen y contemplar el retablo dejaría a cualquiera con una sonrisa de oreja a oreja. En Antequera hay tantas cosas que hacen que la vida sea maravillosa que es mejor ir y vivirlo.