El Chiringuito el Faro es un restaurante ubicado en la carretera que conecta la playa de San Miguel con el emblemático Faro del Cabo de Gata. Entre medias, la pintoresca Cala de El Corralete, es testigo de los casi 60 años que esta casa de comidas lleva abierta desde 1965.
El Faro se ha consolidado como un rincón gastronómico único, donde la tradición familiar y la excelencia culinaria se encuentran en un enclave aislado y sereno. El tradicional restaurante, heredado por las tres nietas de José y María, ofrece una experiencia que va más allá de la simple gastronomía, mostrando a todos sus comensales unas impresionantes panorámicas de Cabo de Gata.
El Faro destaca por su fusión de cocina mediterránea y española, utilizando pescados frescos del Parque Natural de Cabo de Gata como base para sus platos, entre los que sobresalen sus variadas paellas y las frituras de pescado. Además, se adapta a diversas necesidades dietéticas, con opciones vegetarianas, veganas y sin gluten, haciendo que cada comensal encuentre su lugar en este refugio.
A primera vista, El Faro puede pasar desapercibido para quienes llegan en coche hasta la torre de Cabo de Gata. Sin embargo, su amplia terraza exterior y su comedor-galería, ambos con vistas al mar, deleitan a los curiosos que han hecho una parada aquí. El restaurante, dirigido bajo una cálida tradición, ofrece un ambiente acogedor y un servicio atento, resaltando por muchos clientes que “la familiaridad del restaurante es uno de los fuertes de venir a El Faro”.
El encontrarse aislado del cúmulo de chiringuitos que se encuentran en plena playa de San Miguel, le confiere un carácter más sosegado y apacible. A pesar de estar rodeado de un paisaje prácticamente desértico, el chiringuito el Faro es un refugio contra la soledad que sugiere su ambiente.
El atardecer en las terrazas es una de las experiencias más buscadas en esta zona de Almería, y en este chiringuito, acompañado de música ambiental que suele haber, lo convierte en una tónica habitual. Tras disfrutar de un buen menú, los visitantes pueden aventurarse hasta el Arrecife de las Sirenas y descubrir calas naturales escondidas.
Con comodidades como aparcamiento, servicio de mesa, tronas para los más pequeños y un bar completo, El Faro no solo ofrece una gastronomía de calidad, sino también una experiencia completa en un entorno privilegiado. Sin duda, es un destino imprescindible para quienes proyectan quedarse unos días en Cabo de Gata o simplemente van de paso por la zona.