Los buñuelos, cuya variedad es infinita, es uno de esos dulces indispensables de la geografía española. Morder esa bolita caliente frita en mucho aceite, y sentir la explosión en la boca del sabor del relleno, es una experiencia única. La versión que más defensores tiene es la de que su origen está en la provincia de Málaga.
Esa bolita caliente está hecha con harina, agua, leche, huevo y levadura, entre otros ingredientes, y luego se fríe en una gran cantidad de aceite. Hay de todos los sabores, dulces y salados. Además de los famosos buñuelos de viento que, una vez fritos, se rellenan con crema o chocolate.
Los datos dicen que los buñuelos llegaron a España en el siglo 16, aproximadamente, pero la versión que cuenta con más defensores es que estos surgieron en Almogía, un pueblecito de Málaga, en el año 1090. La historia cuenta que, cuando se cerró la fortaleza de la ciudad, la cantidad de comida descendió. Fue en ese momento cuando un panadero, Abdelaziz ben Drisi el Jabazún, hizo un recuento de los alimentos y cocinó unas tortitas con agua y harina. Luego las metía en unos calderos con aceite hirviendo que usaban para tirárselo a los rivales.
El chocolate, que le da un toque exquisito a los buñuelos, tardó más en llegar. Sin embargo, una de las recetas más famosas de este dulce, la de calabaza, es originaria, tal y como cuentan las crónicas locales, de los primeros años de las Fallas de Valencia.
Los mejores buñuelos de Málaga
Pese a que los más conocidos por la gente son los buñuelos dulces –los de los puestos que hay repartidos por la ciudad tienen chocolate, Kinder o Nutella– los mejores de Málaga son salados, según Tripadvisor.
Rellenos de queso de cabra y miel, se comen en Tres 14 Tapas & Café, en Torremolinos. "No puedes dejar de pedirlos", "Son un espectáculo", "Soberbios" o "Son mi perdición" son algunos de los comentarios en la web de los clientes sobre estos buñuelos, en la que el bar cuenta con 313 opiniones excelentes.