La nueva generación de la Serie 5 de BMW -y ya van seis- vio la luz por primera vez hace apenas un par de meses. Sin embargo, la gama de la berlina media de BMW ya ha recibido numerosas incorporaciones destacadas, como una variante híbrida enchufable (530e) y una de carácter deportivo, la denominada M550i xDrive.
Sin embargo, no ha sido hasta ahora cuando la marca alemana ha desvelado la primera de las versiones EfficientDynamics, centradas en la máxima eficiencia posible mediante diversos ajustes mecánicos y electrónicos. El primer integrante de la nueva Serie 5 en llevar este apellido será el 520d EfficientDynamics, que se podrá ver en el Salón del Automóvil de Ginebra 2017.
Estéticamente los cambios son prácticamente inapreciables, limitándose a una suspensión unos milímetros más baja para mejorar la aerodinámica del conjunto, unas llantas de aleación de diseño exclusivo y algunos logos repartidos por la carrocería, que informan de la versión.
No se conocen datos del interior, aunque sí de su mecánica, equipando un motor de dos litros y cuatro cilindros, sobrealimentado mediante un turbo de doble entrada, ofreciendo 190 CV y 400 NM. Está asociado, de serie, a una transmisión automática de 8 velocidades mediante convertidor de par, que envía la fuerza al eje trasero.
Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7.5 segundos, alcanzando los 235 km/h de velocidad máxima. Son cifras más que suficientes para garantizar unas reacciones rápidas y seguras en cualquier circunstancia, aunque el 520d ED es sensiblemente más lento a la hora de acelerar que el 530e, ya que la versión enchufable tarda en pasar de 0 a 100 km/h sólo 6.2 segundos.
En términos de eficiencia, el 520d ED homologa un consumo medio de entre 3.9 y 4.3 litros a los 100 km, dependiendo del equipamiento del vehículo. Este consumo implica unas emisiones de CO2 de entre 102 y 114 gr/km. Aun siendo unas cifras muy destacables, siguen siendo peores que las del 530e, que homologa 2 litros/100 km.