Motor

Lewis Hamilton no se resiste a la moda de los UTV

2 febrero, 2017 11:06

El nueve veces Campeón del Mundo de Rallies, Sébastien Loeb, el dos veces ganador del Dakar Nasser Al-Attiyah, la estrella televisiva y piloto Volkswagen del GRC, Tanner Foust. Todos ellos, pilotos profesionales, todos ellos han caído en la tentación. El último en unirse a la lista ha sido Lewis Hamilton. El británico, tricampeón del Mundo de Fórmula 1 ha añadido a su lujoso y exclusivo garaje un Can-Am Maverick X3 X DS Turbo R.

Los UTV, siglas de Utility Task Vehicle, o también conocidos como Side-by-Side por la cercanía entre piloto y copiloto dentro del limitado espacio del vehículo, se han convertido en una buena alternativa de recreo para todos los apasionados del off-road. Buena parte de su éxito se basa en su ligereza, las grandes capacidades fuera pista, tanto por campo como incluso en el desierto (es el vehículo que utilizan los equipos de raids para entrenar navegación) y la no presencia de elementos que distraigan al usuario de la conducción pura.

En el caso del piloto británico, se ha hecho con una de las unidades más destacadas del catálogo que ofrece la firma canadiense, hasta ahora conocida más por su faceta de constructor de motos de nieve y quads. Hace ya unos años que Can-Am decidió apostar también por los vehículos UTV, siguiendo el paso de marcas como Polaris y Yamaha que ahora han encontrado en el Dakar un buen altavoz con el que publicitar sus productos gracias a que desde la edición de 2017 son considerados como la quinta categoría del rally-raid más duro del planeta.

En el caso del Maverick X3 muestra una imagen rompedora, casi al estilo Mad-Max, con apenas unas fibras que hagan la labor de carrocería. Bajo el capó un motor Rotax ACE con turbocompresor e intercooler que eroga 156 CV de potencia para un peso de 666,9 kilógramos en seco. Pero el principal secreto de la versatilidad y grandes capacidades off-road de este modelo reside en su suspensión. Con un recorrido de suspensión de hasta 60,9 cm y 38 cm de altura libre al suelo, pocos son los baches y obstáculos que se le resistan al UTV de Can-AM, una especie de Trophy Truck en miniatura.

FOX, socio de confianza de la empresa norteamericana, es la encargada de firmar los amortiguadores, con su modelo 2.5 Podium RC2 HPG, mientras que la suspensión trasera de brazo oscilante permite salir indemne de cualquier aparatoso aterrizaje tras salto. Un juguete que en España se puede conseguir por 28.399 euros en su versión X3 X DS Turbo R.