La apuesta por la movilidad ecológica de la industria automovilística es cada vez más intensa. El pasado Salón de Frankfurt, que acaba de cerrar sus puertas, ha sido el más claro escaparate de esta tendencia que no sólo no frena, sino que se magnifica con el paso de los años.
Una de las sorpresas de esta edición lo ha dado la alemana Opel, que ha presentado el Grandland X PHEV, el que será el primer híbrido enchufable de la marca germana. Este modelo es muy importante para la firma tras su absorción por parte del gigante francés PSA la pasada primavera.
Opel ya tiene experiencia en modelos de corte ecológico, como atestiguan el pasado Ampera, uno de los primeros eléctricos de autonomía extendida del mercado, y el recién lanzado Ampera-E, un monovolumen eléctrico con más de 500 kilómetros de autonomía que llegará a nuestro mercado en los próximos meses.
El Grandland X PHEV, sin embargo, utilizará tecnología francesa para su propulsor híbrido, siendo el primer paso en la estrategia de negocio de PSA, que poco a poco irá eliminando de la gama de Opel todo rastro de plataformas y propulsores de origen General Motors (anterior propietaria de Opel).
De esta manera, el nuevo híbrido enchufable de Opel se beneficiará de la nueva planta motriz desarrollada por PSA, sistema que posteriormente se extenderá a otros modelos tanto de Peugeot como de Citroën. Con un propulsor eléctrico alimentado por baterías y un motor térmico que, dependiendo de la variante escogida, puede ser diésel o gasolina, el Grandland X PHEV disfrutará de una autonomía eléctrica que rondará los 60 km.
Estará disponible con dos niveles de terminación, denominados Selective y Excellence, que darán acceso a un equipamiento muy completo desde el primer escalón, estando disponibles elementos como los faros LED inteligentes, el portón de maletero con apertura manos libres o el sistema de asistencia remota Opel OnStar.