Infiniti sigue buscando ser una gran alternativa a los principales modelos premium de las firmas europeas. La marca nipona ha aprovechado la proximidad del Salón del Automóvil de Los Ángeles para presentar el que es su nuevo todocamino mediano, el Infiniti QX50, llamado a ser uno de los grandes rivales de los Audi Q5, Mercedes GLC, Volvo XC60 o el recién presentado Jaguar F-Pace.
Su rompedora imagen está inspirada en el coche conceptual QX Sport Inspiration Concept, plasmando en él las principales señas de identidad con las que cuentan la mayoría de los modelos de la firma de lujo de Nissan. Según explica Christian Meunier, Vicepresidente de la división global de la marca, en él podemos encontrar todo lo que representan los valores de Infiniti, desde su diseño único hasta la utilización de tecnología avanzada, pasando por un gran rendimiento de todos sus modelos.
En este caso estrenará una nueva plataforma para vehículos de tracción delantera y motor en disposición frontal. Para su construcción se ha optado por el acero de alta resistencia SHF, material que permite una gran resistencia sin incrementar demasiado el peso y además mejorando los valores de rigidez frente a la torsión respecto a la anterior generación del QX50. Los responsables aseguran que, gracias a él, también se logra reducir la sonoridad y las vibraciones en marcha.
Su carrocería luce unas medidas de 4,69 metros de longitud y 2,8 metros de distancia entre ejes. El habitáculo cuenta con cinco plazas, permitiendo que una vez plegada la segunda fila de asientos, la capacidad de carga del maletero pase de los 895 litros hasta los 1.699 litros con las plazas traseras abatidas. Una de las novedades que presenta en su configuración es que dichos asientos también pueden adelantarse, algo que reduce el espacio para los ocupantes de estos asientos, pero que permite llevar el volumen de carga hasta los 1.048 litros sin necesidad de plegar el respaldo.
En cuanto al equipamiento tecnológico, incorpora el asistente de conducción autónoma, ProPilot, el cual permite que el ordenador controle la dirección, así como el freno y el acelerador en autopista, por el momento sólo para mantenerse en un carril, aunque se espera en el futuro una nueva versión que permitirá al sistema realizar cambios de carril sin la intervención del conductor.
En cuanto a la mecánica, se anuncia un propulsor gasolina de cuatro cilindros 2.0 VC con turbo que eroga 268 CV de potencia y un par de 380 Nm a 4.400 rpm. Según Infiniti, la relación de compresión variable (8: 1 ~ 14: 1) permitirá además un importante ahorro de combustible. Sus prestaciones anuncian un 0 a 100 km/h de 6,3 segundos en tracción total y de 6,7 segundos en dos ruedas motrices. La velocidad punta por su parte se estable en los 230 km/h