El Congreso de los Diputados se encuentra en proceso de tramitación de una propuesta para anular la subida del Impuesto de Matriculación en la próxima Ley de Medidas de Prevención y Lucha contra el Fraude Fiscal.
Así, el Partit Demòcrata (PDeCAT) ha impulsado esta iniciativa dentro de la llamada Ley Antifraude, después de que el Congreso rechazase, con los votos en contra de PSOE, Podemos, ERC, Más País y Bildu, una enmienda al proyecto de Presupuestos Generales del Estado que pretendía modificar dicha tasa.
Esta enmienda también había sido presentada por el PDeCAT y contaba con el apoyo de PP, VOX, Ciudadanos, Junts per Catalunya, Coalición Canaria, Nueva Canarias, CUP, UPN, Foro Asturias y PRC, además de los principales fabricantes del sector, que han defendido públicamente este cambio.
Según ha podido saber Europa Press, la nueva iniciativa ya está registrada, aunque la tramitación de la Ley Antifraude se encuentra a la espera de que se conforme la ponencia de la Comisión de Hacienda que analizará el texto y empezará a realizar los primeros cambios.
En su documento, PDeCAT busca un cambio en los tramos de aplicación del Impuesto de Matriculación para revertir lo ocurrido el pasado 1 de enero, cuando se incrementó el precio de los vehículos nuevos como consecuencia de la nueva legislación ambiental.
"La entrada en vigor de la normativa WLTP (más estricta) supondrá un aumento en el valor de emisiones oficiales, ya que el dato es aproximadamente un 20% superior al vigente. De no corregirse esta modificación de carácter estrictamente técnico, en España el impuesto de matriculación se vería inmediatamente incrementado y, además, para muchos modelos supondría perder la actual bonificación del impuesto", reza el texto, que ya fue presentado a finales de 2020.
Esto es debido a que dicho impuesto está ligado a la cantidad de dióxido de carbono (CO2) que homologa cada automóvil. Al cambiar la legislación y hacerla más estricta, los coches homologan una cifra mayor, por lo que saltan de tramo en la tasa y pagan más.
Así, el partido catalán propone que los modelos que emiten menos de 144 gramos de dióxido de carbono (CO2) por cada kilómetro recorrido no paguen el impuesto de matriculación, mientras que en la actualidad están exentos de abonar esta tasa los coches que emiten menos de 120 g/km.
También modifica el resto de escalones, ya que los vehículos que emiten entre 144 y 192 gramos de CO2 pagarían un 4,75% de este impuesto (120-160 gramos en la actualidad), mientras que un 9,75% lo abonarían aquellos clientes que optasen por automóviles que emiten entre 192 y 240 gramos de CO2 (ahora está en los 160-200 gramos). El último tramo, a pagar por aquellos vehículos que expulsen más de 240 gramos, sería del 14,75% (en la actualidad pagan este porcentaje los que emiten más de 200 gramos de CO2 por kilómetro).