
Llenado de combustible de un vehículo en una estación de servicio.
El coche que menos gasta según la OCU con 3,8 litros a los 100 km: la mejor opción en España para ahorrar combustible
La Organización de Consumidores y Usuarios ha señalado en un listado los coches que menos consumen de gasolina, diésel e híbridos.
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El consumo de combustible sigue siendo un factor importante a la hora de elegir un coche, especialmente en un momento como en el que nos encontramos, en el que la eficiencia energética es una gran prioridad para muchos conductores en España. Y es que, aunque los vehículos eléctricos siguen ganando terreno en el mercado automovilístico, los modelos de combustión interna siguen dominando el mercado. Esta es una de las razones principales por la que los fabricantes siguen intentando optimizar cada vez más su rendimiento y hacer cada vez más eficientes los coches de gasolina y diésel.
Precisamente si lo que buscas es un coche que gaste poco y te ayude a ahorrar más en el gasto de carburante, pero sin renunciar a un buen rendimiento, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), ha elaborado un listado con los modelos más eficientes del mercado, según el consumo homologado por los fabricantes. Desde coches de gasolina y diésel hasta híbridos e híbridos enchufables.
Entre todos los coches analizados por la OCU, hay uno que destaca por encima del resto en términos de eficiencia: el Mazda 2 Hybrid. Con un consumo de tan solo 3,8 litros cada 100 kilómetros, se posiciona como la mejor alternativa dentro de los coches sin enchufe. Gracias a su tecnología híbrida, logra optimizar el consumo de combustible, reduciendo el gasto y mejorando la autonomía sin necesidad de depender de una toma de corriente.
Otros coches con bajo consumo
Si bien el Mazda 2 Hybrid es el más eficiente en términos de consumo, también existen otras opciones que destacan por su bajo gasto de combustible. Otra de ellas es el Toyota Yaris 120 H, con 3,9 l a los 100 km. Este se sitúa como la segunda mejor alternativa según la OCU combinando un motor de gasolina con asistencia eléctrica. Gracias a la asistencia del motor eléctrico, los híbridos como este, reducen considerablemente el consumo en ciudad y trayectos urbanos, donde más pueden aprovechar su tecnología.
En tercera posición destaca el Renault Clio dCi 100 CV, con un consumo de 4,1 l/100 km. A diferencia de los dos anteriores, este modelo funciona con motor diésel, siendo una opción interesante para quienes realizan viajes largos o necesitan una autonomía mayor en carretera. Tres modelos que, según la OCU, destacan como las mejores opciones para quienes buscan coches con motor de combustión y el menor gasto de combustible.
Dentro de los coches de gasolina, el Toyota Aygo X es el más ahorrados con un consumo de 4,8 l/100 km, seguido de cerca por el Mitsubishi Space Star 120 MPI con 4,9 l/100 km. Estos modelos destacan también por su tamaño compacto y por ser perfectos para ciudad. Además, el Skoda Fabia TSI 116 CV, el Hyundai i10 1.0 MPI 67 CV y el Peugeot 208 PureTech 100 comparten un consumo de 5l/100 km. Tres opciones también interesantes para quienes estén buscando un coche urbano eficiente sin recurrir a la hibridación.
En el apartado de diésel, además del Renault Clio dCi, modelos como el Skoda Octavia TDI 116 CV y el Volkswagen Golf TDI 115 CV ofrecen consumos de 4,3 l/100 km, lo que los hace ideales para recorridos largos, donde este tipo de motor sigue siendo una de las mejores opciones en cuanto a autonomía. Por su parte, el Audi A3 30 TDI y el BMW 118d, con 4,6 l/100 km, mantienen la eficiencia dentro del segmento premium, aportando un plus en calidad y tecnología.
Por último, dentro de los microhíbridos, el Kia Ceed 1.6 CRDI MHEV y el Suzuki Swift 1.2 Mild Hybrid, con 4,4 l/100 km, demuestran que la electrificación parcial puede ayudar a reducir el consumo sin necesidad de enchufes. Otras opciones como el Opel Corsa Hybrid 1.2, el Lancia Ypsilon Ibrida y el Peugeot 208 Hybrid también logran mantenerse en cifras cercanas, con 4,5 l/100 km.
Desde compactos urbanos hasta diésel para largos recorridos, la oferta de coches con bajo consumo sigue creciendo, con el objetivo de reducir gastos y mejorar la movilidad sin renunciar a la comodidad y a un buen rendimiento.