El Grupo Piaggio es más conocido mundialmente por ser el padre de la Vespa. La clásica motocicleta siempre ha sido una forma sencilla y ligera de moverte por las grandes urbes a lo largo y ancho del planeta, un elemento que ha ido tomando aún más valor durante los últimos años gracias a las modas vintage que se han ido sucediendo en prácticamente todos los sectores. Sin embargo, el grupo italiano ha querido dar una vuelta de tuerca a la movilidad del ser humano.
Lejos de presentarnos otro de sus ciclomotores, Piaggio ha mostrado durante la pasada semana en Boston sus dos nuevos conceptos de robots: el Gita y el Kilo. Ambos proyectos buscan ahondar en la movilidad autónoma, en esta ocasión para los viandantes. Creados por el nuevo equipo especializado en tecnología en Estados Unidos (Piaggio Fast Forward), esta especie de androides tratarán de hacer la vida más fácil a sus dueños transportando compras, pequeños bultos u otros bienes. O lo que es lo mismo, tratar de reducir la dependencia del ser humano al coche.
Con el objetivo de reducir el tráfico en los centros de las ciudades, se han creado ambos modelos. En el caso de Gita, está dirigido a cargas más pequeñas, pudiendo portar hasta 18 kilogramos de peso y ser capaz de desarrollar hasta 35 km/h. El software que incorpora no sólo permite seguir allá por donde vayas, sino que también podría moverse sin necesidad de tu presencia en ciertos espacios o locales que ya estuviesen mapeados anteriormente. Una opción que puede ser realmente útil en grandes centros comerciales, estaciones de tren o aeropuertos, ayudándote a transportar tus pertenencias hasta el vehículo.
Kilo por su parte no mantiene el diseño esférico de su hermano menor. La tercera rueda que incorpora este modelo es un buen indicativo que está dirigido a transportar bultos mayores, tanto en cuanto a peso como en volumen. Podrá llevar hasta 100 kilógramos de peso, mientras que en su interior tiene una capacidad de 120 litros. En principio, ambos productos son propulsados por baterías, pero aún no ha sido desvelado ni su fecha de comercialización ni el precio de los mismos. Sin embargo, es un buen indicativo del horizonte hacia el que se dirige la movilidad: los vehículos autónomos.