Hoy hace 23 años que la granadina Ana Orantes contó públicamente en televisión que su marido era un maltratador. El calvario que estaba pasando. Sólo 13 días después de esa aparición, su maltratador la asesinó.
Hoy, muchas mujeres en redes han recordado quién era Ana Orantes y el cambio que supuso su valiente confesión y la ministra de Igualdad, Irene Montero, se ha querido sumar al homenaje a una mujer víctima de malos tratos que se convirtió en el símbolo de una lucha que ni siquiera entonces tenía estadísticas propias.
"Su testimonio abrió el camino de las políticas públicas para luchar contra la violencia machista", ha recordado.
Día después del 25 de noviembre como Día por la Eliminación de la Violencia de Género, muchas mujeres han vuelto a recordar el drama que sufrió Ana Orante cuya muerte ni siquiera está incluida en las 1.075 asesinadas de las que se tienen registro, desde 2003.
En 1997, cuando ella murió, el Estado ni siquiera contaba estos asesinatos como una violencia especifica contra las mujeres. Ana Orantes había presentado varias denuncias y ninguna había conseguido protegerla. Llevaba 40 años sufriendo malos tratos físicos y psicológicos y sólo la denuncia en televisión había tenido cierto impacto.
"No tenía dónde ir. No podía irme con mis padres ni con nadie. Tenía que aguantar, que aguantarlo que me diera palizas. Paliza sobre paliza", recordaba en el plató de televisión Ana Orantes en esa entrevista imprescindible para entender la lucha de las mujeres contra la lacra que las asesina.
El programa de Canal Sur, que presentaba la periodista Irma Soriano, trataba de dar voz a mujeres que querían pedir ayuda tras años de infiernos, golpes y palizas. Quince días después, Irma Soriano tenía que abrir su programa hablando de la muerte de una mujer que supuso la chispa que necesitaban muchas más para gritar: "Ni una más".