En los últimos años, las publicaciones ucranianas han ido creando su propia identidad. Sin embargo, desde la invasión rusa, las estrategias y los ritmos han cambiado por completo. Los periodistas se encuentran en primera línea de batalla, como reporteros y mediadores para publicaciones internacionales que están deseosas de obtener la experiencia local.
Los profesionales de la información están haciendo periodismo mientras defienden sus pueblos y ciudades. Pero no un periodismo cualquiera, ahora la mayor parte de los comunicadores se ha convertido en corresponsal de guerra. Este cambio también ha llegado a las publicaciones de moda y cotilleos.
Mientras revistas femeninas en todo el mundo continúan publicando sobre moda, belleza y celebridades, las ediciones ucranianas han pasado a explicar cómo disparar y sobrellevar emocionalmente un conflicto armado. Dos ejemplos los podemos encontrar en periodistas de Vogue y Marie Claire.
La resistencia de Marie Claire
Iryna Taterenko, editora jefe de Marie Claire, expresó en una entrevista para The Drum: “Lo siento por ser cínica, pero estoy harta y cansada de escribir sobre fiestas glamurosas y celebridades.
"“Espero que la guerra termine pronto”
Puede ser genial entrevistar a algún diseñador de moda sobre sus colecciones en la Semana de la Moda de París o Milán, pero mi último proyecto es entrevistar a la señora de la limpieza, que limpia después de los bombardeos. Y esto es, en este momento, mucho más importante que entrevistar a una estrella glamurosa”.
Explicó que se trata de un nuevo desafío y que quiere ser lo más útil para los lectores, aunque no es algo de lo que le gustaría escribir durante mucho tiempo. “Espero que la guerra termine pronto”.
Además, ha confesado que su equipo está activamente involucrado en la defensa territorial de Ucrania. La editora de belleza es parte de la defensa territorial y ha capturado a dos soldados rusos. Mientras, otra editora está creando redes de camuflaje y la gerente de marca está involucrada en el bloqueo de webs de propaganda rusa.
“Contamos historias”
La editora cultural de Vogue Ucrania, Darya Slobodianyk, decidió quedarse en Kiev cuando estalló el conflicto. “Soy el sostén de mi marido que está asignado a un hospital como médico”, declaró en una entrevista para Clarín.
Además, continuó explicando que al ser periodista se ha mantenido trabajando las 24 horas del día. “Publicamos historias de los supervivientes, de los bombardeos, entrevisto voluntarios, militares y activistas”.
Información útil
Comparte desde la edición ucraniana de Vogue información útil con sus lectoras. Desde tópicos femeninos sobre cómo mantener la lactancia durante la guerra hasta cómo actuar durante los bombardeos para sobrevivir.
“La transición de ser editora de cultura de la revista a convertirme en corresponsal de guerra fue sencilla: después de todo, contamos historias”.
La guerra de la desinformación
Los periodistas ucranianos, sea cual sea su área de especialidad, todavía están lidiando con la desinformación rusa. Además de contrarrestar la desinformación en Ucrania, tienen el reto de corregir las noticias falsas fuera de su territorio.
“Hace dos días me sorprendió mucho cuando hice tres o cuatro entrevistas con Sudáfrica y me hacían preguntas extrañas y estúpidas como: ¿Por qué hay discriminación hacia los rusohablantes?”, apunta Taterenko.
Además, se marca su objetivo como periodista en informar a sus lectores y decir la verdad. “Eso es lo que he estado haciendo a diario y mientras viva no dejaré de hacerlo”.