El precioso pueblo asturiano para perderse este invierno: reconocido en todo el mundo por sus luces navideñas
- Esta pequeña aldea se ha ganado a pulso su título de uno de los pueblos más navideños de España por su decoración impresionante y su entorno natural único.
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Los amantes de las escapadas invernales están de suerte porque en las siguientes líneas van a activar automáticamente una necesidad: viajar hasta uno de los pueblos más bonitos de todo Asturias. ¿Lo mejor de todo? Que podrás desconectar, literalmente, de toda la cotidianidad y disfrutar como un niño.
Olvídate de los destinos en los que siempre imaginamos disfrutar del invierno o, mejor aún, de la Navidad: grandes ciudades llenas de luces y mercados navideños donde comprar dulces típicos y productos artesanales. En esta ocasión te proponemos una pequeña aldea que ha logrado convertirse en un referente navideño único en el mundo.
Se trata de Aciera, un diminuto pueblecito de no más de 37 habitantes, ubicado en el concejo de Quirós, que durante el mes de diciembre se transforma en un verdadero espectáculo de luz y color. Si buscas un lugar mágico y acogedor para vivir la Navidad, te acabamos de descubrir tu viaje soñado.
Un pueblo de Navidad único
Aciera, aunque pequeña en tamaño, tiene un gran impacto cuando se trata de iluminar el espíritu navideño. Su fama ha trascendido fronteras, convirtiéndose en uno de los pueblos más navideños de España y sorprendiendo incluso fuera del país.
Este encantador rincón asturiano ha conseguido lo que pocos: ser un referente por su decoración navideña. Lo que hace que Aciera destaque no es solo la magnitud de sus luces, sino el esfuerzo colectivo de sus vecinos para crear un ambiente navideño único que atrae cada año a decenas de turistas.
El secreto de esta transformación mágica radica en la colaboración de los habitantes del pueblo, quienes se organizan para decorar cada rincón. No importa cuán pequeño sea, ni si se trata de las fachadas de las casas, los árboles, las farolas o incluso los caminos que llevan hasta el pueblo.
Cada espacio está decorado con luces que crean una atmósfera de cuento de hadas. La ilusión y el esfuerzo colectivo se notan en cada detalle, lo que convierte a Aciera en un destino inigualable para vivir la Navidad de una forma auténtica.
El encendido de las luces de Navidad
Cada año, el encendido de las luces marca el inicio de la Navidad en Aciera, y es un evento que los habitantes esperan con gran ilusión. Este encendido no solo es una actividad festiva, sino que simboliza la unidad del pueblo.
Organizado por la Asociación Vecinal "Canor Fandos", el evento incluye actividades como la chocolatada, sorteos de cestas navideñas y, por supuesto, villancicos y música en vivo, todo en un ambiente cálido y cercano. Es el momento perfecto para disfrutar de la hospitalidad de los vecinos, quienes comparten su alegría con todos los visitantes.
El encendido se celebra durante el puente de la Constitución, y ese día, Aciera se llena de vida. Familias enteras, especialmente niños, recorren las calles iluminadas, maravillándose ante el despliegue de luces que parece sacado de un cuento navideño. La sensación de comunidad y la calidez de los habitantes convierten a este pequeño pueblo en uno de los destinos más especiales de la temporada.
El esfuerzo de todo un pueblo
Lo que hace aún más especial a Aciera es el hecho de que su decoración navideña no es organizada por ninguna gran empresa ni apoyada por grandes instituciones, sino que es un esfuerzo completamente local.
Los vecinos se organizan por su cuenta, sin más apoyo que el del propio Ayuntamiento, que se encarga de la iluminación de las calles. Pero todo lo demás, desde las instalaciones de luces hasta la decoración artesanal de cada rincón, es obra de los habitantes del pueblo. Este trabajo en equipo es lo que le da un carácter tan único a la aldea y es la razón por la que Aciera se ha ganado su lugar en el corazón de todos quienes la visitan.
Un entorno natural inigualable
Además de su decoración navideña, Aciera se encuentra en un entorno natural impresionante. Situada cerca del Parque Natural de las Ubiñas-La Mesa, un área declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO, el pueblo ofrece a los visitantes la oportunidad de disfrutar de rutas de senderismo rodeados de paisajes montañosos que en invierno adquieren una belleza especial. La Senda del Oso, un recorrido famoso entre ciclistas y excursionistas, está cerca de allí y es otro de los atractivos de la zona.
Para aquellos que deseen combinar la magia de las luces de Navidad con una dosis de naturaleza, Aciera ofrece la ruta hacia el Collado de Aciera, una caminata de dificultad media que lleva a los visitantes a explorar los alrededores del pueblo.
El recorrido, de aproximadamente 5 kilómetros y dos horas de duración, es ideal para disfrutar del paisaje montañoso y respirar el aire fresco de la zona.
¿Cómo Llegar a Aciera?
Llegar a Aciera es relativamente fácil. Desde Oviedo, el trayecto en coche dura unos 50 minutos, tomando la A-66 hasta Trubia y luego la AS-229 hacia Quirós, pasando por pintorescos paisajes asturianos. Desde Gijón, el viaje sigue una ruta similar, pasando por Oviedo antes de tomar la AS-229.
No importa tu punto de partida, el camino hacia Aciera es una oportunidad para admirar la belleza natural de Asturias, convirtiendo el trayecto en una parte del encanto de la visita.