A medida que pasa el tiempo empiezan a aparecer esas pequeñas marcas en la piel que nos echan años: las arrugas. El rostro es la zona en la que son más visibles y puede convertirse en un complejo cuando nos hacemos mayores, sobre todo, por la cantidad de áreas en las que pueden establecerse, como el entrecejo, las patas de gallo, párpados o comisuras de los labios.
Aunque aún no se haya encontrado la fórmula secreta que elimine estas marcas o ralentice el proceso, cuando no queremos optar por procedimientos quirúrgicos o tratamientos estéticos, los remedios naturales se convierten en nuestra salvación.
No sería la primera vez que en el mundo de la belleza una solución casera se convierte en un producto estrella, ya conocemos el aceite de coco para las canas o el café para las manchas de la piel. Tan grande es este fenómeno que muchas personas a día de hoy incluso prefieren elegir los productos naturales ante aquellos que contienen fórmulas artificiales.
Los avances en la ciencia en cuanto al mantenimiento de la piel tan solo llevan unos años con nosotros. Hace siglos, o sin irnos tan lejos, nuestras abuelas, tenían que apanárselas con lo que tenían en casa, tanto a la hora de la belleza como el cuidado facial y corporal. Con todos los remedios caseros que encontraban eran capaces de corregir imperfecciones, neutralizar arrugas u oscurecer las canas.
En la actualidad, a pesar de que sí que contamos con todos esos avances, hay ocasiones en las que o bien no queremos gastarnos mucho dinero en tratamientos que pueden ser temporales y dejar de funcionar con el paso del tiempo o preferimos optar por esos ingredientes fáciles de conseguir. O que, directamente, tenemos en casa.
El ingrediente para eliminar las arrugas y patas de gallo
El aceite de oliva es un ingrediente básico de la cocina española. El oro líquido que se extrae del fruto que lleva su nombre cada día es un bien más preciado, pero seguro que no falta en nuestra estantería por todos los usos que tiene y lo indispensable que resulta en diferentes recetas. A pesar de que no seas un gran amante de ello (que es difícil) su papel eficaz traspasa incluso las paredes de esta habitación.
Sus ricas propiedades hidratantes y antioxidantes lo convierten en uno de los ingredientes naturales más empleado en productos de belleza. Es rico en ácidos grasos esenciales, vitamina E y polifenoles, todas ellas excelentes aliadas en cuanto a la protección y reparación de la piel. En cuanto al envejecimiento prematuro, el aceite de oliva es un humectante natural que ayuda a mantener la piel hidratada, lo que se traduce como una ayuda para reducir la aparición de arrugas.
Uno de los motivos por los que surgen arrugas es porque se pierde colágeno en la piel. El aceite de oliva aumenta este compuesto y mantiene la dermis firme y elástica, por lo que no solo neutraliza y elimina las líneas de expresión, sino que previene su formación.
La inflamación es otro de los conceptos que pueden contribuir al envejecimiento de la piel y al desarrollo de arrugas. El aceite de oliva tiene propiedades antiinflamatorias encargadas de reducir la hinchazón y tratar estos signos de la edad.
Su uso se puede emplear en todo el rostro, sin embargo, es un gran aliado para la las patas de gallo, donde aparecen las primeras arrugas o el cuello, donde podemos estimular la producción de colágeno a partir de movimientos circulares ascendentes con el producto.
Como utilizar el aceite de oliva en la piel
El aceite de oliva se puede emplear de muchas maneras, así como incluso podemos obtener sus beneficios consumiéndolo. Sin embargo, podemos aplicarlo directamente en la piel incidiendo en áreas más pronunciadas. Estos son los pasos que debemos seguir:
- El primer paso consiste en limpiar bien la cara, eliminando cualquier tipo de residuo o suciedad
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Una vez hecho, vamos a aplicar el aceite de oliva en un algodón o en la yema de los dedos eliminando el exceso
- Poniendo especial atención en zonas más pronunciadas vamos a masajear el producto para que la piel lo absorba
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En caso de que al aplicar este producto nos ocasione molestias, debemos interrumpir inmediatamente el tratamiento, pudiendo optar en esta situación por productos como jabones o cremas que contenga aceite de oliva
Este ingrediente es un excelente aliado contra las arrugas y generalmente es bien tolerado por la mayoría de las pieles, no obstante, aquellas personas con pieles grasas deben evitar este tratamiento. Su empleo se recomienda referiblemente por la noche, evitando así la sensación de grasa durante el día y con posibilidad de lavarnos el rostro una vez haya penetrado la piel.