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Soy dermatóloga y este es el truco más sencillo y efectivo para eliminar la papada: "Pocas personas lo conocen"

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La papada, también conocida como doble mentón o cuello ganso, es un exceso de grasa bajo el mentón y la mandíbula. Esta acumulación de grasa y descolgamiento de la piel es uno de los problemas estéticos más comunes tanto en hombres como en mujeres, que además de ser desfavorecedor, tiene el poder de hacerte envejecer de inmediato.

Las búsquedas en Google de "cómo deshacerse de la papada de la noche a la mañana" y "opciones de tratamiento para la papada" han crecido exponencialmente en los últimos años, ofreciendo resultados que van desde trucos de maquillaje para el contorno hasta inyecciones y cirugía. Sin embargo, puede ser difícil saber cuáles de estas "soluciones" realmente valen la pena, por lo que recurres a los expertos.

En este contexto, la dermatóloga neoyorquina Debra Jaliman recomienda el aceite de semilla de uva. Un masaje habitual con este producto puede cambiar la forma de nuestro rostro, debido a todas sus propiedades, entre las que destacan el ácido linoleico.

El aceite de semilla de uva para la papada

El aceite de semilla de uva es un producto natural altamente valorado por sus propiedades antioxidantes, hidratantes y nutritivas, lo que lo convierte en un aliado potencial para reducir, eliminar y prevenir la papada. Aunque no es una solución milagrosa para la grasa localizada, su uso regular puede mejorar notablemente la firmeza y la elasticidad de la piel.

Una de las principales razones por las que el aceite de semilla de uva es beneficioso para esta zona del cuerpo es su contenido rico en antioxidantes, especialmente en compuestos llamados proantocianidinas. Estas sustancias son potentes en la neutralización de radicales libres, lo que ayuda a prevenir el daño celular que conduce a la pérdida de elasticidad de la piel.

La papada puede acentuarse con el tiempo debido al envejecimiento natural, ya que la piel del cuello tiende a volverse más flácida. Aplicar aceite de semilla de uva de manera tópica puede promover una regeneración celular más saludable, retrasando el proceso de envejecimiento y mejorando la firmeza cutánea.

Además, el aceite de semilla de uva contiene ácidos grasos esenciales, como el ácido linoleico, que son fundamentales para mantener una barrera cutánea saludable.  "Este ácido del aceite de semilla de uva promueve la producción de elastina para tonificar la piel", afirma la dermatóloga Debra Jaliman.

Una piel hidratada y nutrida es menos propensa a mostrar signos de flacidez, lo que puede hacer que la papada sea menos evidente. La aplicación de este aceite ayuda a mejorar la textura y el tono de la piel, proporcionándole un aspecto más suave y terso.

El aceite de semilla de uva tiene propiedades astringentes naturales que ayudan a tensar la piel, lo que puede ser particularmente útil para prevenir el desarrollo de una papada. Este efecto tensor puede ser reforzado si se utiliza el aceite como parte de una rutina de cuidado de la piel que incluya exfoliación suave y ejercicios faciales específicos.

Por este motivo, la mejor forma de aplicar el aceite de semilla de uva es con masajes habituales. De esta forma, podemos estimular la circulación y mejorar el drenaje linfático, reduciendo la hinchazón y la retención de líquidos, que a veces contribuyen a que la papada parezca más prominente. 

Cómo realizar masajes con el aceite de semilla de uva

Para conseguir eliminar la papada con masajes, lo más sencillo que debemos de aprender es a ser constantes. De esta forma, conseguiremos hacer una rutina y, por tanto, conseguir que esa estimulación sea de forma frecuente. 

Con ayuda de este producto, nuestras manos fluirán mejor por nuestra piel y evitaremos irritaciones y, sobre todo, conseguiremos que los movimientos sean mucho más efectivos, sin necesidad de presionar. 

En este caso, vamos a ayudarnos de nuestros nudillos para masajear la papada y el cuello. Con movimientos descendentes, vamos a estimular la circulación de la zona y procurando no hacer mucha fuerza, sino simplemente deslizar el puño por la zona con una presión óptima, pero sin pasarnos.

Masaje facial.

Podemos realizarlo con nuestras propias manos; sin embargo, también podemos ayudarnos de otras herramientas como los rodillos, la piedra gua sha o bolas de acupresión.

Este ejercicio debería realizarse todos los días con unas 10/15 repeticiones, añadido a otro tipo de masajes y ejercicios en la zona podemos conseguir tonificarla en poco tiempo, siempre y cuando prestemos atención a otro tipo de factores, como la dieta, la postura o los malos hábitos.