Con el invierno a la vuelta de la esquina, las temperaturas comienzan a exigir prendas más gruesas y abrigadas, y entre ellas, los abrigos de pelo que han vuelto con más fuerza que nunca.
Esta prenda, que hace unos años parecía relegada a ciertos círculos de la moda, ha experimentado una transformación que ha hecho que, en este 2024, se posicione como una de las tendencias más destacadas de la temporada otoño/invierno.
Aunque hoy los encontramos mayormente en versiones sintéticas, los abrigos de pelo tienen un origen asociado a la aristocracia y la alta sociedad. Desde finales del siglo XIX hasta principios del XX, el lujo y la exclusividad eran representados por las pieles, prenda que se convirtió en símbolo de estatus.
Ya en la década de los 50, con figuras como Marilyn Monroe o Elizabeth Taylor, los abrigos de pelo se consolidaron como una declaración de glamour, adoptados por las grandes estrellas del cine de la época.
Sin embargo, la polémica relacionada con el uso de pieles naturales fue llevando a que, con el tiempo, muchas firmas optaran por alternativas sintéticas que ofrecieran el mismo estilo y confort, pero sin el costo ético asociado.
¿Qué ha sucedido para que los abrigos de pelo vuelvan a ser un imprescindible en nuestros armarios? Gran parte de este resurgimiento puede atribuirse a la poderosa influencia de las redes sociales, especialmente TikTok e Instagram, donde los looks con ellos se viralizan con facilidad.
Los usuarios, en su mayoría jóvenes, han rescatado la estética eslava, que abrazó este tipo de abrigos en su versión más exuberante y cálida. Además, la moda de los Y2K —es decir, el estilo de principios del milenio— también ha hecho que prendas de lujo como estas encuentren nuevamente su lugar en las tendencias actuales.
No es casualidad que este otoño-invierno 2024 los abrigos de pelo se han impuesto en las pasarelas, con colecciones de marcas de renombre, como Fendi, Prada o Balenciaga, que han apostado por este estilo tan llamativo. Desde propuestas con modelos oversize hasta versiones con animal print o estampados en colores vibrantes como el naranja o el burdeos.
Pero no son solo las grandes casas de moda son las que están detrás de esta tendencia. Influencers y celebridades, como Kendall Jenner y Hailey Bieber, han sido las primeras en sumarse a la fiebre de los abrigos de pelo, luciéndolos tanto en sus looks de día como en eventos exclusivos.