Maria Callas y su trágico final: Angelina Jolie revivirá los últimos años de la soprano
La historia de la cantante de ópera está marcada por una combinación de éxito y tragedia. Sus últimos años llegarán a la gran pantalla bajo la dirección de Larraín.
27 octubre, 2022 16:41La actriz Angelina Jolie interpretará a la soprano Maria Callas en el biopic que prepara el director chileno Pablo Larraín y llevará por título Maria, según anunció la revista especializada en cine Variety.
Jolie será la encargada de representar en la gran pantalla a una mujer que, como ella, también fue un icono en su sector con una exitosa carrera profesional a sus espaldas. Pero la historia de Callas también estuvo marcada por la tragedia, solo hay que dirigir la mirada hacia su vida privada y al final de su trayectoria.
El largometraje, que estará basado en hechos reales, contará la trágica historia de la prestigiosa cantante de ópera durante sus últimos días en la década de los setenta en París, según han anunciado medios internacionales.
[La divina Maria Callas se desnuda en sus cartas]
La mejor cantante de ópera del siglo XX fue Maria Callas, apodada 'La divina'. A pesar de su muerte prematura, a los 53 años (1977), su recuerdo sigue intacto en la memoria de millones de personas en todo el mundo que hoy siguen disfrutando de su voz.
Su mayor don se encontraba tanto en su innata musicalidad como en saber hacer de sus defectos sus mayores virtudes. Magnética en escena, no solo fue reconocida por sus dotes vocales, sino también por su talento a la hora de interpretar.
Sin embargo, parte de su fama no respondió a razones artísticas. Su vida privada, especialmente su relación con Aristóteles Onassis, hicieron que ocupara portadas de la prensa rosa cuando su carrera estaba en declive.
En cualquier caso, el fenómeno Callas, que duró algo más de una década, dejó una marca imborrable en el mundo de la lírica.
Entre Atenas y Nueva York
Hija de inmigrantes griegos, Maria Anna Cecilia Sofia Kalogeropoúlou nació en agosto de 1923 en Nueva York (Estados Unidos). Tras la separación de sus padres, en 1937 se trasladó junto a su madre y hermana a Grecia, donde comenzó su formación en el Conservatorio Nacional de Atenas y se especializó en la tradición del bel canto romántico italiano.
En febrero de 1942 debutó por primera vez en el Teatro Lírico Nacional de Atenas y su primer éxito llegaría en agosto del mismo año en la Ópera de Atenas con Tosca. Dos años más tarde, ante el avance de la II Guerra Mundial, Callas decide regresar a Estados Unidos.
Volvió a los escenarios en el 47, en una compañía fundada por Bagarozy y Ottavio Scotto, un empresario italiano. Aceptó cantar Turandot en Chicago. Por aquel entonces, su voz en los pianos era bellísima, aunque se señala que tenía un timbre metálico que no sabía anular con la técnica. Fue llamada una soprano assoluta o soprano sfogato.
Una tragedia griega
Así comenzaba la carrera de una soprano que en los siguientes años no dejó de subirse a escenarios de todo el mundo. En Italia conoció Giovanni Battista Meneghini, quien se convertiría en su esposo en el 49. Se trataba de un industrial de la construcción, treinta años mayor que ella y decisivo en la gestión de su incipiente carrera. La cantante cambió entonces su nombre a Maria Meneghini Callas.
Se fue consolidando. Su voz era inigualable. En el 58, antes de representar Norma en la ópera de Roma, contrajo un resfriado, pero La Scala no la quiso sustituir. Callas acabó huyendo de la actuación y declaró haberlo hecho por no poder estar a la altura. "Nadie puede sustituir a Callas" fue la respuesta del teatro.
Un año más tarde, dejó a Giovanni Battista Meneghini por el magnate naviero Aristóteles Onassis. Fue un romance que la prensa no se cansó de difundir y que se convertiría en una 'tragedia griega'.
Durante su idilio, Callas se retiró un tiempo y a nadie se le pasó por alto, cuando regresó, que su voz había perdido fuerza y evidenciaba los signos de decadencias que se habían comenzado a advertir unos años atrás.
Los siguientes años estuvieron llenos de críticas hacia sus dotes vocales. En el 66, Callas renunció a la ciudadanía estadounidense y tomó la griega para anular su matrimonio con Meneghini, con la esperanza de que Onassis le propusiera matrimonio. Pero esto nunca sucedió. Dos años más tarde la abandonó para casarse con Jacqueline Kennedy, la viuda del presidente estadounidense John Fitzgerald Kennedy, asesinado en Dallas.
La soprano nunca pudo superar el abandono y jamás se lo perdono, pese a que Onassis la buscaría después, ya que su matrimonio se convirtió en un martirio. El dolor emocional, al que había que sumar una súbita pérdida de peso, aceleró el deterioro de su voz y acortó su longevidad vocal.
En 1970, anunció que había querido suicidarse con una sobredosis de barbitúricos. En esos años tomaba somníferos para dormir. El 16 de septiembre del 77 Callas se despertó en París con un dolor punzante en el costado izquierdo y se desmayó. En la cama bebió un café fuerte y antes de que llegara el médico murió.
Su urna fúnebre fue robada y encontrada unos días más tarde. Finalmente, sus cenizas acabaron dispersas en el mar Egeo.
Un museo para 2023
El próximo verano se cumplirán 100 años del nacimiento de la icónica cantante de ópera y la fecha coincidirá con la apertura del Museo Maria Callas en Atenas (Grecia), según informa Greek Travel Pages.
Un edificio neoclásico renovado, que cumplió anteriormente la función de hotel, exhibirá material histórico, archivos de audio y colecciones únicas de registros y objetos personales de la soprano.
La ciudad adquirió artículos relacionados con Maria Callas en el año 2000 por primera vez, a través de una subasta internacional en París, y a lo largo del tiempo la colección se ha ido enriqueciendo gracias a donaciones de instituciones y particulares.
“Estoy conmovido no solo porque Atenas está honrando a su diva con un museo especial que estará listo el próximo verano, sino también porque la colección de exhibiciones hoy crece aún más gracias a esta conmovedora donación”, dijo el alcalde.