María Yáñez García, conocida como La Bella Dorita.

María Yáñez García, conocida como La Bella Dorita.

Protagonistas

Bella Dorita, la vedette catalana del "fumando espero" que desafió la censura con picardía

En 'Donde habitan los recuerdos. Memorias de La Bella Dorita',ahondo en la vida de la cantante y bailarina española que marcó el siglo pasado.

30 septiembre, 2024 08:10

La primera vez que oí hablar de La Bella Dorita fue porque me invitaron a una bebida con misterio en un local con este mismo nombre. En aquel momento no podía imaginar que, muchos años después, descubriría la apasionante vida de esta mujer y recorrería con tanta dedicación sus 100 años de existencia.

Soy Noelia Pérez Ponce, maestra de vocación y escritora por pasión. La escritura llegó mucho tiempo después de la enseñanza y vino a complementarla. Con los años ha ido tomando vida propia. 

Jamás imaginé que algo pudiese llenar tanto mi alma. Ni siquiera sabía que tenía alma hasta que empecé a escribir. No es que ocurra todo el tiempo, pero hay momentos en los que se convierte en una experiencia extracorpórea, que te recorre e incluso a veces te desgarra las entrañas. 

Escribir es otra manera de sentir, de experimentar, y cuando lo has probado, sabes que no puede ser algo pasajero, sino algo que quieres tener en tu vida para siempre. Es la primera vez que verbalizo esta pasión por la escritura y cuando vuelvo a releer lo que acabo de escribir, pienso ¿estoy hablando de la escritura o del amor?

Me gusta explorar diferentes géneros, y poder descubrir en cuál de ellos me siento más cómoda. Hasta ahora he disfrutado navegando entre géneros tan dispares como el cuento, la poesía, el thriller psicológico, la novela histórica e incluso guías para opositores. 

Todos tienen su encanto, hasta las guías, pero quizás, y de momento, ya que amenazo con seguir probando otros géneros, el que más me cautiva es aquel que me lleva a vivir junto a las protagonistas historias pasadas. 

Algunas de mis protagonistas han sido mujeres poderosas como la última reina nazarí en la Alhambra o la diosa del Molino, también conocida como reina del Paralelo. Pero lo que a mí de verdad me atrae cuando escribo, no es la pomposidad, estrellato o glamour que pudiesen rodearlas cuando llegaron a lo más alto, me gusta ahondar en sus orígenes, en sus miedos, en sus 'miserias'. Desnudar a la persona, no al personaje. 

Mi primer acercamiento a la escritura fue como herramienta para llevarla al aula. Con aquello que escribía, pretendía trabajar con mis alumnos/as las emociones, los conflictos que surgen durante el día a día en el aula o poesías que permitiesen jugar con ellos y divertirnos con el lenguaje. 

Después se me ocurrió añadirles propuestas didácticas que pudieran servir de ayuda a otros docentes. Una de las experiencias más gratificantes cuando he conjugado escritura y educación la he vivido con uno de mis últimos cuentos: La escuela del acantilado.

A través de pistas con una linterna y un libro de claves que proporciona el mismo libro, los alumnos tienen que ir descifrando mensajes secretos que les lleven a averiguar el misterio de los cuadros. De esta manera, se acercan a Van Gogh, Picasso o al Cubismo de un modo más entretenido. 

A la enseñanza y escritura vino a unirse otra gran pasión: la historia. Así, surgió en un aula de secundaria, estudiando la época musulmana, la que sería mi primera novela: Zoraida. De esclava cristiana a reina de Granada. 

Cada una de las novelas que he escrito han tenido como protagonistas a mujeres que han tenido que sobrevivir a un entorno hostil y luchar por saber quiénes son. Todos los relatos están escritos en primera persona y algo que me apasiona de la escritura es comprobar cómo las protagonistas van tomando vida propia y cogen las riendas, no solo de su vida, también del relato y terminan siendo ellas las que me guían. 

Por ello, hay historias maravillosas que no merecen quedar en el olvido. Y este es el caso de mi última novela: Donde habitan los recuerdos. Memorias de La Bella Dorita

Portada de 'Donde habitan los recuerdos. Memorias de la Bella Dorita'

Portada de 'Donde habitan los recuerdos. Memorias de la Bella Dorita'

María Yáñez, una joven y humilde andaluza, llega al barrio de Gràcia en Barcelona y terminará convirtiéndose en la reina de El Paralelo. Su existencia transcurre en la España del siglo XX, arrollada por los acontecimientos políticos y sociales. 

Con 17 años, comenzó su carrera artística como tanguista en el Royal Cabaret, un café concierto del Paral·lel. Poco después, ya con el nombre artístico de Bella Dorita, empezó a cantar cuplés en la Sala Apolo y en el Teatre Pompeia. De los años 40 a los 60, fue la cantante y bailarina de cabaré más emblemática de la ciudad. Fuera del Paral·lel colaboró en espectáculos de revista con Mary Sampere, Alady y José Sazatornil.

En 1965, decidió retirarse del mundo del espectáculo, cansada de luchar contra la censura de la dictadura franquista.  En el 2001, con 100 años, fue galardonada con la Medalla al Mérito Artístico de la Ciudad de Barcelona. Hoy da nombre a una plaza delante de El Molino.

En el devenir de sus cien años de existencia, María vivirá su coronación como la más bella, la caída de un mantón que le dará el título del primer desnudo en la historia, los locos años veinte, la censura y la pasión. 

Será una mujer que despertará permanentemente la controversia en un país marcado por la tradición. Una mujer digna de permanecer en la memoria. ¿Acaso no es el lugar donde habitan los recuerdos?